Revista Cine
Grandes esperanzas (Mike Newell, 2.012)
Sinopsis:
El joven huérfano Pip deja atrás su origen humilde gracias a un misterioso benefactor. Moviéndose en la sociedad londinense como un caballero, Pip usa su nueva posición para seducir a la hermosa Estella, una heredera a la que ama desde la niñez. Sin embargo, la terrible verdad detrás de su gran fortuna tendrá consecuencias devastadoras para todo lo que ama. Del aclamado director de "Cuatro bodas y un funeral" y "Harry Potter y el cáliz de fuego". La versión más moderna del clásico de Charles Dickens. Protagonizada por los dos veces nominados al Oscar Ralph Fiennes ("El paciente inglés") y Helena Bonham Carter ("El discurso del rey").
Ficha:
Título Original: Great Expectations.
Director: Mike Newell.
Guionista: David Nicholls.
Intérpretes: Jeremy Irvine, Ralph Fiennes, Helena Bonham Carter, Holliday Grainger, Robbie Coltrane, Olly Alexander, Jason Flemyng, David Walliams, Sally Hawkins, Jessie Cave, Toby Irvine, Ewen Bremner, Ralph Ineson, Richard James, Tamzin Outhwaite, Malcolm Tierney, Ben Lloyd-Hughes, Helena Barlow, Ronnie Fox, Shonn Gregory, Bebe Cave, Harry Kershaw, Nick Bartlett, William Ellis, Charlie Callaghan.
Productores: Elizabeth Karlsen, Stephen Woolley, David Faigenblum, Emanuel Michael.
Fotografía: John Mathieson.
Música: Richard Hartley.
Montaje: Tariq Anwar.
Países: Reino Unido, Estados Unidos.
Lugares de Rodaje: Inglaterra (Reino Unido).
Fechas de Rodaje: 10 de octubre del 2.011.
Año: 2.012.
Duración: 128 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 7 años.
Género: Drama, Romántica.
Distribuidora: A Contracorriente Films, S. L.
Estreno: 27-03-2.013.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España.
Espectadores: 0.
Recaudación: 0 €.
Calificación: 6,180.
Crítica:
01-04-2.013 – ANTÓN MERIKAETXEBARRIA
Huérfano de la tormenta
Versión en tono menor de la inolvidable novela homónima de Charles Dickens, que no supera y ni siquiera iguala las dignas adaptaciones realizadas por David Lean (1.946) y Alfonso Cuarón (1.998). Las peripecias de un joven huérfano, Pip, en su camino hacia la madurez y la nobleza, están resueltas con el habitual buen gusto que caracteriza al cine británico cuando aborda clásicos de su literatura, situados en suntuosos ambientes victorianos. Así que, una vez más, la ambientación en general, sobre todo por lo que respecta a los decorados, el vestuario y la fotografía (las luces las pone John Mathieson, el camarógrafo de "Gladiator") se convierten en lo más destacado de la función.
Los problemas de la película empiezan cuando intenta transmitir emociones sin cuento, amores y desilusiones varias, la intensa pulsión romántica que el argumento original atesora, la misma mixtura de fantasía y realidad, de bondad y maldad, de riqueza y pobreza que, tal y como los describe el director Mike Newell, con toda su corrección y academicismo, resultan más frías que un carámbano. Es como si su máximo responsable temiera adentrarse en una estética cinematográfica más arriesgada; de ahí que la película no tenga la grandeza de un texto literario universal.
"Grandes esperanzas", más allá del minucioso retrato de época y de su maravillosa galería de personajes secundarios, es la propia condición humana. En ese sentido, el filme se muestra respetuoso con su excelsa fuente de inspiración, pero sus intérpretes no tanto, a algunos de los cuales les falta garra, inmediatez y calor humano. Con excepción de la versátil Helena Bonham Carter, que borda su fantasmagórico personaje de Miss Havisham. Al tiempo, la película se muestra insuficiente a la hora de describir a la raza humana, que es como las flores; cuando una generación nace otra fenece.