Los fondos internacionales están mandando cartas a la banca y retomando contactos con el Gobierno para intentar evitar que se apruebe el temido recorte retroactivo de las primas para las plantas solares en funcionamiento. Una encuesta entre inversores califica este movimiento de “insensato” por parte del Gobierno.
[Nota de Jumanji: importantes aclaraciones al final del artículo]
Nerviosismo entre los inversores internacionales ante la más que probable aprobación de otro recorte del 30% para las primas solares fotovoltaicas, esta vez para las plantas en funcionamiento. Fondos internacionales han mandado cartas a los principales bancos españoles para expresarles su preocupación, dado que estas rebajas pondrían en riesgo las inversiones realizadas y el pago de los créditos asociados a la construcción de estas plantas. Fuentes del sector afirman que desde estos fondos y desde las embajadas internacionales se ha contactado con Industria en este sentido, alarmados ante el riesgo para las inversiones realizadas. La Asociación Empresarial Fotovoltaica (AEF) apuntó el martes que en España hay invertidos 20.000 millones en proyectos fotovoltaicos por bancos internacionales, inversores institucionales y particulares. Industria, por su parte, no quiso realizar ningún comentario a este periódico.
Según una encuesta de por la firma británica Opinion Research Business entre 80 inversores de 52 firmas, que gestionan activos por valor de ocho billones de euros, un cambio retroactivo sería, para un 76% de estos encuestados, “un movimiento insensato por parte del Gobierno en un momento en el que necesita la confianza de la comunidad inversora“. El 71% afirma que sería “una violación de la confianza de los inversores“.
Los resultados de la encuesta “demuestran claramente que un cambio con carácter retroactivo a las actuales inversiones en energía solar fotovoltaica impactaría negativamente en la confianza de la comunidad inversora en España y le costaría al Gobierno español y a las empresas miles de millones de euros, además de incrementar el coste de la deuda soberana española y el precio del dinero para bancos, utilities y empresas reguladas con el fin de compensar el incremento del riesgo en futuras inversiones“. El 74% de los encuestados destacó, de hecho, que el Gobierno español “no sería un Gobierno de confianza si realiza estos cambios retroactivos“.
Si los temores expresados por la industria a través de la AEF el pasado martes se cumplen, el recorte del 30% se aprobaría en alguno de los dos Consejos de Ministros que restan antes de que acabe el año. Supondría, según los primeros cálculos, un ahorro para el sistema de más de 800 millones al año. Este recorte se realizaría a través de una limitación de horas de funcionamiento de las plantas, en concreto, se quedaría en unas 1.250 horas para las instalaciones fijas y unas 1.644 para plantas con seguidores.
Aumento de la prima de riesgo para España
Según esta encuesta de Opinion Research Business, de aprobarse este recorte retroactivo de las primas, los inversores “buscarán mayores retornos para las inversiones en España“. El aumento promedio de las primas de riesgo, según estas opiniones recogidas, sería de “un 0,87% para las utilities (eléctricas), un 0,85% para los bancos, un 0,74% para otros negocios regulados, un 0,83% para el equity español y un 0,63% para los fondos soberanos españoles“. De este modo, se incrementaría el conjunto de la deuda soberana española en casi 4.000 millones de euros.
“Una acción de este tipo“, asegura este estudio, “podría desencadenar una acción concursal de todos los vehículos de las compañías fotovoltaicas, alrededor de 50.000 en España“. “Sería una quiebra anunciada“, afirman.
Fuente: Cinco Días
Hemos vivido este año serias amenazas de recortes retroactivos que pusieron en pie de guerra no solo al Sector Fotovoltaico, sino también a la Banca, a las Constructoras y por supuesto a los inversores extranjeros, que en su día ya enviaron una carta al Presidente del Gobierno. Incluso Barack Obama, a través de su Vicepresidente Joe Biden, hizo llegar el malestar de EEUU ante semejante posibilidad.
A principios de Mayo publicamos un Análisis del riesgo de la modificación retroactiva de la tarifa de las instalaciones solares fotovoltaicas, y a finales de Julio los asesores jurídicos del fondo alemán KGAL aseguraron que las medidas retroactivas propuestas serían anticonstitucionales y que tomarían cartas en el asunto.
Y es que, regular de forma retroactiva sería enormemente perjudicial para los intereses de España. Perderíamos muchísima confianza internacional, algo que actualmente no nos sobra, encareciendo y dificultando la colocación de nuestra deuda. Este artículo hace incluso estimaciones muy precisas de cómo podría afectar a los Bancos y Eléctricas, así como a otros negocios regulados, equities y Deuda Pública. Y estamos hablando de los valores a priori más seguros.
Nos sorprendíamos enormemente con el hecho de que el lobby energético esta vez no culpase a la fotovoltaica de la subida de la luz, pero ya tenemos el motivo: una regulación retroactiva de este calado encarecería los bonos del Fondo de Amortización del Déficit Tarifario (FADE) avalados por un Estado muy poco fiable, dificultando mucho su colocación internacional, y poniendo en serio peligro la recuperación de la deuda por parte de las Compañías Eléctricas. Los Bancos además, nacionales e internacionales, que financiaron la gran parte de estas inversiones con Project Finance, se verían en serios aprietos a la hora de recuperar sus préstamos.
Digiriendo todo lo anteriormente dicho podemos pensar que las empresas del sector fotovoltaico, por grandes que puedan llegar a ser, no representan más que una ínfima parte de los actores afectados. Están en juego intereses económicos y geopolíticos globales.
¿Por qué se baraja esta medida?
De cara a la opinión pública, semejante suicidio estatal se haría a cambio de no aplicar en su totalidad la anunciada subida de la tarifa eléctrica a los consumidores que se beneficiarían en el corto plazo a costa de dejar su futuro pendiendo de un hilo.
En relación a la reducción del Déficit Tarifario, pues todo esto carece de sentido si dicho ahorro lo absorben los consumidores, perjudicando además a las Eléctricas como ya hemos visto.
Lo que más puede enfurecernos de todo esto es la estupidez de sacrificar una tecnología con futuro a cambio de mantener unas ayudas a otra que tiene fecha de caducidad: el Carbón.
¿Qué sería razonable hacer?
1º) Por supuesto, no aplicar nunca y en ningún caso medidas retroactivas contra una actividad regulada.
2º) Si es necesario, incrementar la tarifa de venta de la electricidad en Enero en menor medida que lo propuesto para ganar un trimestre en el que definitivamente se tomen las decisiones y se adopten las medidas pertinentes que han caído en el olvido todo este tiempo.
3º) Que el Sr. Sebastián haga lo que en estos dos años y medio largos no ha sido capaz: PONERSE A TRABAJAR. Las patronales fotovoltaicas han planteado líneas de actuación muy sanas relacionadas con la repotenciación e inspección de instalaciones que contribuirían a resolver el entuerto lavando además la imagen del sector y fortaleciendo la credibilidad legislativa del Estado.
4º) Abordar de una vez por todas el Pacto de Estado para la Energía y arreglar los desastrosos fallos que tiene este mercado.
Publicaremos en los próximos días un artículo sobre la repotenciación además de otros sobre el nuevo revés a la fotovoltaica y la subida de la tarifa eléctrica.