Monólogo del duro sargento Hartmann, gran personaje de La chaqueta metálica (1987), del maestro Stanley Kubrick.
"Hoy es Navidad. Habrá una sesión de magia a las 09.30. El capellán Charlie os va a decir cómo el mundo libre vencerá al Comunismo con la ayuda de Dios y unos pocos marines. A Dios se le pone dura con los marines, porque matamos a todo bicho viviente. Él juega a lo suyo, nosotros a lo nuestro. Y para mostrarle nuestra gratitud por su inmenso poder, le llenamos el cielo de almas hasta los topes. Dios ya existía antes que el cuerpo de marines, así que el corazón se lo podéis dar a Cristo, pero el culo pertenece al cuerpo, ¿habéis entendido, nenas?"