Revista Deportes
Hasta hace 5 años, Charlie Austin (Hungertord, 1989) se levantaba a las 5:30 de la mañana para meterse en una furgoneta junto a otros diez compañeros, para ir a trabajar a la fábrica de ladrillos de su padre. En temas de fútbol, además de haber coincidido en el mismo equipo de barrio con Theo Walcott, pasó por las categorías inferiores del Reading, pero tardó tanto en crecer que le cortaron con 15 años. En sus horas libres jugaba en el Poole Town como futbolista aficionado, un equipo de la novena división inglesa. Algunos días de partido, los desplazamientos se podían alargar hasta altas horas de la madrugada. Pocas horas en la cama y de vuelta a empezar.
En una entrevista concedida a “The Guardian” confesó: "Recuerdo un día, cuando tenía 17 años, que estaba trabajando en un sitio que se llama Overton. A las dos de la tarde estábamos empapados y me sentía como si tuviera la espalda de cristal. No me podía ni doblar y estaba cubierto de barro. Si alguna vez me canso del fútbol, me acordaré de ese día". Sólo unos meses después de esa conversación forzó su salida al Burnley, de segunda, en lo que hoy tacha como error de inmadurez.
Bendito error Señor Austin. Con 20 años estabas de albañil y ahora con 25 años eres la sensación de la Premier League y máximo goleador nacional. Roy Hodgson, ¿te sabes el eslogan de una tal cadena de establecimientos de grandes superficies, dedicada a la venta de electrodomésticos, informática y electrónica?
Otra bella historia que nos regala el fútbol, de forma gratuita, sin peajes, sin pedir nada a cambio. Quien ama el fútbol, agradece escuchar cosas como las de hoy, ¿entonces? En GOL&PUNTO no somos tontos y cargaremos contra todos aquellos que quieran quitarnos la ilusión. A todos esos os regalamos esto: “Hay quien se queda en la cúspide de la pirámide pisando cabezas y quien baja para ayudar”