Revista Conciertos
Con todo el ruido que ha generado en los últimos meses, me esperaba algo más potente. "Green Room" es un buen entretenimiento, pero partiendo de una premisa tan cojonuda como "una banda punk queda atrapada en un local de conciertos asediada por una skinheads sedientos de sangre", las expectativas se disparan y la posterior decepción es gorda. Ya sabeis, en seguida uno piensa aquella parida de "si lo hubiese dirigido yo hubiese quedado 1.000 veces mejor".
Y, de acuerdo, la banda de chavalines punk DIY tienen un pase -aunque yo hubiese preferido unos sociópatas cafres a lo "El Regreso de los Muertos Vivientes" o "Curso del 84"-, pero lo de los skin-heads no tiene perdón: esa panda de pardillos debería haber sido reemplazada por unos pelados homicidas como los de The Warriors. Eso sí, lo de la versión del "Nazi Punks Fuck Off" de Dead Kennedys ante un auditorio formado por compañeros de juergas de Albert Rivera es un punto cachondo a su favor.
"Retorno de los Muertos Vivientes"
Los Tunrbull A.C.'s al acecho de nuestros Warriors