Película de culto. ¿Quién no la ha visto? ¿Quién no se ha reído con el magnífico humor negro de los Gremlins? ¿Quién no ha hecho bromas con comer después de las 12, o mojarse? Todo eso indica la gran repercusión que tuvo el film en los años 80, poseyendo la capacidad de atraer al público juvenil y al más maduro por igual. La progresión de la película es envidiable, y el diseño de Gizmo, como el de los Gremlins del infierno sigue siendo perfecto, con esos aires de serie B, que tan bien sienta en este caso. Por último destacar la gran banda sonora, con toques terroríficos a la par de humorísticos.
Mi Puntuación: 7.6