En cuanto coges la caja de este videojuego te da la sensación de encontrar un RPG al puro estilo japonés, con diseños de personajes muy currados y una apariencia visual muy por encima de la media. Pero no es oro todo lo que reluce y este Growlanser se queda un poco verde a la hora de dar la talla en el aspecto jugable.
Con un sistema de combate entre los turnos y los juegos de acción directa, entraremos en diferentes combates que nos irá propiciando la trama del juego. Esos combates, a veces son algo confusos y otras veces demasiado difíciles como para poder avanzar de una manera más o menos fluida.
No es de extrañar que repitas una y otra vez la batalla de marras para poder proseguir con la aventura. Pero que si tienes la paciencia suficiente puedes disfrutar de un título mucho más grande de lo que piensas.
La historia es lo bastantemente compleja para tenernos enganchados a la consola para poder descubrir qué va a pasar a continuación aunque el doblaje al inglés no acompaña y como suele ocurrir en la mayoría de los videojuegos, parece que los dobladores lo hacen sin ganas.
Si quieres probar algo nuevo y diferente en la consola de Sony, probar Growlanser no es mala idea, ya que conocerás otro punto de vista de cómo desarrollar un RPG.
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