Más de 20.000 guatemaltecos han resultado afectados por las consecuencias de la tormenta Agatha, que tocó tierra este sábado perdiendo fuerza y dejando lluvias torrenciales, 12 muertos confirmados, 16 desaparecidos, y cientos de evacuados entre algunas inundaciones.
Agatha tocó tierra el sábado como la primera tormenta de la temporada 2010 en la frontera entre Guatemala y México, pero pocas horas después se degradó a depresión tropical, dejando a su paso fuertes lluvias, apagones eléctricos e inundaciones.
Las lluvias causaron el desgajamiento de un cerro en el municipio de Alomolonga, a unos 200 kilómetros al oeste de la capital guatemalteca, y sepultó la vivienda de una familia de cuatro miembros, incluyendo a dos menores.
David de León, jefe de información de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres de Guatemala, confirmó la muerte de otros cuatro menores y cuatro adultos en la capital, e informó de 11 desaparecidos.
“Estamos ante una emergencia seria”, dijo el presidente de Guatemala, Alvaro Colom, en un mensaje transmitido por la noche por radio y televisión, para informar a la población.