Segunda guerra samnita
La Segunda Guerra Samnita tuvo lugar entre el 327 y el 304 a. C., tras la Segunda Guerra Latina, en laque los samnitas apoyaron a Roma. Los samnitas interpretaron como declaración de guerra el apoyo que Roma duio a la ciudad de Nápoles, amenazada por los samnitas, como la fortificación de Fregelas (328 a. C.), siuada en la frontera con Roma.
Se distinguen dos fases en la guerrra: una primera fase (327-321 a. C.) en la cual los romanos trataron de cercar el territorio samnita. Sin embargo, en 321 a. C. los samnitas cercaron al ejército romano en las Horcas Caudinas, permitiendo su retirada en condiciones ridículas y humillantes para los romanos. Eso causó el fin de la guerra hasta el 316 a.C. En 316 a. C. Roma volvió atacar, pero fue de nuevo derrotada en la batalla de Lautulae (315 a. C.). Su siguiente estrategia fue la construcción de la Vía Apia que la comunicaba con Capua, fundando colonias a lo largo de su recorrido para encerrar a los samnitas dentro de su territorio.
En 310 a. C. los romanos vencieron a los etruscos (aliados samnitas desde el 311 a. C.) en la batalla del Lago Vadimón, a orillas del Tíber. Tras un avance sobre Apulia, los romanos tomaron Boviano, la capital samnita.
El fin de la guerra en 304 a. C. supuso el sometimiento de la Campania por Roma, y la renuncia a toda expansión por parte de la Liga samnita.
Tercera Guerra Samnita
La Tercera Guerra Samnita tuvo lugar entre el 298 y el 290 a. C. Los samnitas organizaron una coalición antirromana con los etruscos, sabinos, lucanos, umbros y celtas del Norte de Italia. Roma obtuvo victorias por separado frente a todos ellos y reocupó Boviano (298 a. C.). Las tropas samnitas huyeron hacia el Norte en pos de etruscos y celtas, y en 295 a. C. la alianza luchó contra los romanos en la batalla de Sentino, en la que fueron derrotados.
Tras firmar la paz con los etruscos, Roma fundó la colonia Venusia en Apulia para frenar a los samnitas, quienes finalmente se rindieron en 290 a. C. Desde ese momento, los samnitas se vieran obligados a ceder a Roma tropas auxiliares en caso de contienda, siendo así paulatinamente asimilados por la cultura romana.