Os dejo con el fragmento de esta semana:
No creo mucho en el destino ni en que las cosas pasen por una razón. Creo que uno es dueño de su propio destino, y que nuestras decisiones y acciones son las que marcan el curso de nuestra vida. Pero por desgracia, las decisiones y las acciones de otros también influyen en este curso, y a veces no se puede hacer nada por evitarlo. Tal vez por eso me he aislado tanto del mundo, me he encerrado en mí misma y he rechazado a toda persona, situación o posibilidad que pudiera arrebatarme el control de mi vida. No tengo problemas en admitirlo. Las decisiones, malas y egoístas, de alguien ya afectaron demasiado mi vida. Lo que me preocupa es mi repentina incapacidad de continuar con mi sensata estrategia, probablemente en el momento en que más necesidad hay de que lo haga.Esta vez no puedo daros muchas pistas, pero he intentado poner un fragmento más o menos largo para que sea más fácil. Este fragmento me encantó y desde que lo leí se me ocurrió usarlo para esta sección. Espero que no se os haga muy difícil ;) Por cierto, os recuerdo que los comentarios de esta entrada se publicarán el lunes.
¿Qué os parece el fragmento? ¿Os ha llamado la atención?¿Habéis leído el libro?¡Contadme!