Hábitos saludables

Si quieres invertir en salud, bienestar y diversión; que mejor que dedicarte un día para ti en tu bici. Si eres amante del deporte y disfrutas de la actividad física, el ciclismo es una opción sensacional. Trae muchos beneficios fisiológicos que narraremos a continuación. Es importante siempre hidratarnos, calentar, realizar estiramientos, fijar el recorrido, cronometrar tiempos y disfrutar de un día con la bici, ya sea de manera individual, en familia, con la compañía de amigos o de compañeros de entrenamiento, será una excelente alternativa para cuidar tu figura y tu funcionamiento fisiológico.

A continuación se enfatizará en los beneficios que brinda el ciclismo a dos sistemas principalmente, los cuales son el sistema cardiovascular y el sistema respiratorio. Iniciaremos por el sistema cardiovascular; la actividad física debe ser un proceso continuo, la practica inicial a un ritmo moderado y posteriormente aumentando la exigencia va mejorando la resistencia cardiaca. La demanda de oxigeno es más elevada a medida que el esfuerzo es mayor, el corazón debe suplir los requerimientos de oxígeno y a medida que exijamos más, el corazón se va volviendo más fuerte, por otra parte, al activar el sistema circulatorio y elevar nuestra frecuencia cardiaca, el tejido vascular se hará más flexible y resistente evitando que se generen acumulaciones de grasa en los vasos sanguíneos, proceso que se conoce como "placas ateromatosas" e implica un riesgo cardiovascular.

Continuemos con el sistema respiratorio; cuando respiramos el oxígeno va al árbol pulmonar que se divide en bronquios, bronquiolos y finalmente los alveolos, allí se realiza el intercambio gaseoso; es decir entre oxígeno a los capilares sanguíneos y se libera dióxido de carbono. Hacer ejercicio respirando profundamente en zonas no contaminadas hace que los alveolos se liberen de impurezas de las que se contaminan con la polución del día a día, por este motivo a veces tendemos a tener algo de expectoración cuando elevamos drásticamente la exigencia y no se ha estado practicando de manera continua.

La sangre de un deportista es sin duda más oxigenada, al igual que las células, ya que estimulamos la respiración celular que se realiza específicamente en un orgánelo denominado ribosoma. Esto permite que tengamos más energía. Otros beneficios asociados a la práctica del ciclismo y tener el hábito de disfrutar un día con tu bici están relacionados con la fuerza, el aumento del rendimiento y la masa muscular, la tonificación, también mejora del sistema osteo- esquelético. Los seres humanos funcionamos en conjunto y todo el bienestar del sistema circulatorio y respiratorio se reflejará en una piel más saludable, ya que estará oxigenada, unos riñones que funcionan bien, ya que los vasos sanguíneos estarán más limpios, una tensión arterial controlada, un metabolismo activo, reducción de los niveles de estrés, entre otros beneficios.

Nunca es tarde para iniciar con la práctica de un deporte tan sano y divertido como el ciclismo, o permanecer en la mejora continua cuando ya es un hábito. Empieza por disfrutar de un día con tu bici, fíjate una ruta agradable, utiliza todos los elementos de protección personal. ¡Recuerda! Es una inversión que tu cuerpo y mente agradecerán.