¿Hacía donde navega la nave taronja?

Nadie esperaba caer con el estrépito con el que el equipo valenciano se ha visto eliminado del play-off de la ACB. ¿Cambia los planes del proyecto? No debería. El conjunto taronja seguirá con el apoyo económico de Power Electronics y de su mecenas, Juan Roig. Además, los jugadores que se iban a ir se irán (Cook ya había pagado su cláusula), sólo falta cerrar la renovación de Pesic para dirigir la nave de los de la Fonteta, el eje del proyecto.
Todo el mundo está de acuerdo en que Svetislav Pesic ha sido el hombre milagro que ha convertido al Power Electronics de 2010-2011 en un auténtico acorazado, capaz de ganar a cualquiera, salvo los cuartos de final de la ACB. Alguna voz, incluso le señala con el dedo por haber exigido en exceso a la plantilla tras la primera derrota en el play-off. Sin embargo, sin el nivel de exigencia del serbio no se habrían alcanzado las cuotas tan altas que ha tenido este equipo, ni el grado de compromiso de una plantilla que ha estado en todo momento remando para conseguir el objetivo.
Pues bien, ya se ha perdido la eliminatoria de play-off. No hay Euroliga para 2011-2012 y tiene que comenzar a edificarse el proyecto más importante en la historia del equipo valenciano, el de la consolidación en la elite, entiéndase por elite, los 4 primeros equipos de la ACB. Para ello, es necesario Pesic y el serbio está por la labor de quedarse. Le atrae el proyecto, como le atrajo la oportunidad de hacer crecer a Girona en su día y convertirlo en equipo campeón. La Euroliga tira, pero Valencia tira más para el técnico milagro de los valencianos.
Es por eso que Pesic quiere 2 años para modelar a su plantilla de ensueño. Conoce los mimbres con los que cuenta, pero ha sabido tocar la fibra de la afición y de los mandamases que ponen año a año millones de euros para que el baloncesto siga vivo en la capital del Turia. Difícilmente dirá que no a un proyecto a un año, pese a que sea con una cláusula de renovación automática por cumplir objetivos. El serbio sabe que si le dejan trabajar va a cumplir y es casi una ofensa para el bagaje que lleva en Valencia que no se le de los dos años que pide.
Sin embargo, pese a la temporada fantástica que ha concluido recientemente, hay dudas. El carácter impetuoso del serbio, que le ha enfrentado con personas influyentes del entorno del baloncesto de la ciudad ha generado un clima negativo, aumentado por la prematura eliminación. Dos chinitas en la balanza del debe para una afición que quiere ver a su equipo disputando títulos y finales como se ha hecho hasta ahora.
Entonces, ¿debe el club rendir pleitesía a Pesic y otorgarle plenos poderes? Tampoco es la cosa tal y como la han pintado. El serbio quiere mandar, organizar y también trabajar. Se ha ganado un proyecto a dos años y con el mismo apoyo económico que el de esta temporada y alguna sorpresa que puede caer desde las instituciones públicas, se puede conseguir un gran equipo a dos años vista.
Se va contar con ese dinero, además del extra y se va a seguir contando con las bajas inevitables de Omar Cook y Robertas Javtokas. El pívot lituano podría marcharse a Rusia a ganar mucho dinero en un equipo Euroliga, mientras que Cook tiene a ACB y Europa en general, encandilada. Savanovic puede ser mareado por los euros del Caja Laboral, como cambia la historia…
Valencia está como loca por el baloncesto y este traspies sólo va servir para coger impulso. Eso sí, el impulso lo debe realizar Pesic. Por devoción, tal vez, pero más por practicidad y por una demostración de su capacidad en los meses que ha residido en el banquillo de la Fonteta.