Parece ser que la U.E. ha dado carpetazo al tema griego obligando a los helenos a comprometerse a más recortes, lo que Merkel y la U.E., choteándose, llaman reformas.
El 10 de febrero 2012, cuando todavía no tenía este blog mande a mis amigos una nota con el siguiente comentario:
[Lo lógico para intentar solucionar el inmenso agujero griego hubiese sido que hace más de un año, cuando estalló el problema se hubiese establecido un plan de recuperación extremadamente duro, pero de aplicación a lo largo de un plazo al menos medio, de 5 años, y si la recuperación no era posible ni en 5, ni en 10, ni en 20 años, lo que se tenía que haber hecho ya entonces era la declaración de quiebra del país y su salida del Euro. En su lugar ahogan la economía del país, imponen un Primer Ministro ex-Goldman Sachs, que son precisamente los que ayudaron al gobierno a enmascarar las cuentas y les hacen pasar un calvario a los que menos responsabilidad tienen sobre el desastre. Lo que están haciendo no va a recuperar la economía griega, y por lo tanto no va a proporcionarles recursos para devolver la deuda, ni en 100 años. Mi impresión personal es que Alemania y Francia soportan la mayor parte de la deuda griega, y lo que pretende la Sra. Merkel es aplazar la quiebra todo lo que pueda, y de paso darles una lección a esos sureños caóticos que le han causado el grave problema.]
Al poco tiempo de haber mandado esta nota quedó bien claro que la intención de Merkel era repartir más del 50 % de la deuda griega que entonces estaba en manos de bancos alemanes entre sus socio de la U.E.. No es que yo tenga dotes de adivino, a principios del 2012 todavía no se había iniciado el actual e inmenso clamor mundial sobre la profunda estupidez de las medidas Merkel-U.E. pero si eran ya bastantes los expertos que vaticinaban un desastroso final al rescate de Grecia al estilo Merkel, y buena parte de ellos consideraban un inmenso error no haberla declarado en quiebra.
A pesar de todo, del clamor mundial, de los datos estadísticos, de la absoluta evidencia del total fracaso de las medidas estúpidas, y a pesar también que Grecia está al borde de un grave estallido social por la simple razón que están más que hartos de sacrificarse obedeciendo órdenes de la Loca de Berlín sin que la situación mejore ni un poco, los tontitos de Bruselas y la Loca de Berlín desaprovechan la ocasión para rectificar e imponen a Grecia más de lo mismo, y encima llaman reformas a lo que simplemente son recortes a los ingresos y las rentas de los ciudadanos de a pie. Reformas lo serían ayudar a los griegos a luchar contra el inmenso fraude fiscal, cosa que no harán mientras los defraudadores ricos griegos mantengan buena parte de sus saldos defraudados en bancos alemanes, y también serían reformas ayudarles a modificar su Administración Pública para hacerla menos ineficaz y menos corrupta, algo que, por cierto, también hubiese sido la gran reforma si lo hubiesen hecho en España. Pero Merkel-U.E. solo se interesa por los recortes a la población, no porque sean idiotas perdidos, sino porque su verdadero objetivo como liberales furibundos no es solucionar problemas financieros sino disminuir cada vez más la intervención del Estado en la economía hasta su imposible completa desaparición.
Repitiendo la jugada lo único que consiguen Merkel-U.E. es alargar la agonía griega hasta la próxima rebelión-crisis que puede ser la definitiva o pueden volver a alargar el desastre, pero nunca hasta el infinito, porque algún día estallará.
Cuando ya había escrito esta nota he oído la explicación que Rajoy ha dado en el Senado a un senador socialista sobre el acuerdo Grecia-U.E. Resumiendo, según Rajoy, había una vez unos chicos muy buenos llamados U.E., uno de los cuales, de nombre Grecia, había sido malo, lo que le había causado enormes problemas, pero los otros chicos le convencieron para rectificar y llegaron a un acuerdo por el que el descarriado cumpliría unas normas y los demás le solucionaban los problemas, pero cuando todo iba como una seda, el chico malo estaba solucionando sus problemas y todos contentos, Grecia contrajo una grave enfermedad llamada elecciones y un virus llamado izquierda empezó a destruir todo lo bueno que habían hecho, pero aunque a los demás chicos les costó mucho al final convencieron a Grecia para que volviese al redil y continuase cumpliendo con las condiciones y todos volvieron a ser felices. Que contase un absurdo cuento de hadas es lo de menos, ya estoy acostumbrado a que Rajoy me provoque vergüenza ajena, lo grave es que como hace con demasiada frecuencia mintió, porque se basó en que antes de que Syriza se enfrentase a la U.E. el PIB griego ya se recuperaba claramente e incluso las previsiones para 2015 eran de un aumento del 3%, y lo mismo soltó, sin dar cifras, sobre el desempleo, que había empezado a bajar claramente y en 2015 se preveía un descenso espectacular, pero la rebelión griega ha dado al traste con todo esto y los indicadores económicos han vuelto a caer y el desempleo vuelve a aumentar. Todo falso. Según el Eurostat, el PIB griego había caído espectacularmente hasta 2014, en 2014 se estabiliza y consigue un aumento inferior al 1%, y para el 2015 la previsión es de un aumento de solo el 0,5%, y el desempleo, partiendo del máximo del 27,5% del 2013, a finales del 2014 se situó en el 26,5% y la previsión para 2015 es que descienda hasta 25,6%, y además desde que Syriza gobierna, desde enero 2015, no se han variado las previsiones. Que el Presidente del gobierno utilice datos inventados para mentir en el Senado es muy grave, pero también lo es que en toda la oposición no haya un solo Senador que conozca o compruebe las cifras en uno de los i-pad que hemos pagado entre todos y llame mentiroso a Rajoy en la cara.
Os adjunto un artículo de Alfredo Pastor publicado en La Vanguardia, en que mucho mejor, de manera más suave y con palabras no tan coloquiales como las mías también viene a decir lo que diría Asterix “Están locos estos europeos”.