Sigue…
Pero, aún así, aún creo que la vida no es injusta conmigo, o al menos no más injusta que yo, conmigo mismo! Creo que estoy en “mi camino” como nunca antes lo estuve! Creo que las circunstancias -para bien o para mal- en la vida son pasajeras y que, la mayoría de las veces, te sirven para despertar a la realidad! Y, aunque soy una persona consciente de mi vida ahora y siempre -qué remedio, la vida no me dejó escojer otra opción, desde niño- creo que seguir andando con empeño e ilusión cada día hacia lo que merezco y siento dentro, tendrá su premio, aunque quizás solo lo sienta yo y sin reconocimiento ajeno! Mientras, lo reconozco, me gustaría pasar un tiempo largo (¿este verano, será suficiente?) permitiéndome tomar aire y descansar, me lo merezco. Pero también sé que la vida es implacable y que, conmigo o sin mí, seguirá y deberé como siempre seguir andando…
Pero alguien me dijo hace ya un tiempo que soy una persona líder, a la que algunas personas admiran y siguen -algunos en silencio-… aunque también los hay que sufren por mi. Bueno, todo el mundo tiene derecho a quererme como quiera o a equivocarse! Además, es verdad, soy exigente conmigo mismo y creo que la vida me ha dado salud, talento e inteligencia (aunque los místicos afirmen que ésta es nuestra peor enemiga) y fuerza de voluntad para seguir adelante, día a día. Y también sé que esos talentos son precisamente para andar firme mi propio camino, para así animar a las personas que conozco y quiero a no desfallecer ante la adversidad o los momentos difíciles. Y eso es una responsabilidad y gran parte del sentido de mi propia vida, ahora. Quizás solo deba hacer unos reajustes en mi vida actual, para volver a caminar con energía y, en lo que cabe, demostrar a los que me miran que ellos también lo pueden hacer como yo… nadie es tan especial como uno se cree, en una vida que no hay maestros ni alumnos, posibles!
Como seguramente ya sabes, siempre me pregunto ¿qué espera de mí la vida, en cada momento? Eso me ayuda a encontrarle el sentido y, a la vez, me da valor! Y pienso que ahora quiere que siga adelante, que cambie mi manera de relacionarme con el trabajo y con el mundo y que, por una vez y a la vez, aprenda a sentir por mi mismo y ser más coherente con ello! La vida es equilibrio, nada más! Y, como me dijo un amigo mío hace ya tiempo, “Miguel ya tienes ganado el Cielo, pero la Tierra aún la tienes perdida”. Y seguramente tenía razón entonces…
Seguirá…