La caída contra Alemania en el Mundial de Sudáfrica no debería ser el fin de la gestión de Diego Armando Maradona al mando de la selección argentina de fútbol. Diego demostró que sabe conducir un grupo de estrellas y, si bien es posible que se haya equivocado en el planteo táctico, de los errores se aprende y la única salida es hacia adelante.
En la conferencia de prensa, Maradona no quiso realizar una autocrítica ante los periodistas, explicando, intentando expresar la enorme desilusión que siente frente a la derrota futbolística. “Yo viví esto en el ’82, pero era pibe y no me daba cuenta de las cosas, ahora que voy camino a los 50, es como una trompada de Mohamed Alí”, soltó.
Ahora como dicen en la cancha, hay que aguantar los trapos y esperar que curen las heridas y el dolor.
Diego representa mucho para todos nosotros, los argentinos. Hay que apoyarlo y esperar que siga con su proyecto.
Hay que volver a empezar. Una y mil veces.
Porque la perseverancia también es victoria.
leyendadeltiempo.word.press.com