A consecuencia del atropello el hombre sufrió un fuerte golpe en la cabeza y se fracturó dos costillas. Cuando fue ingresado en el hospital, declaró ante la policía que el accidente había sido culpa suya por no mirar correctamente antes de cruzar.
El taxista se interesó por el estado del atropellado y consiguió hablar con él. Este, de origen británico, le explicó que todo había sucedido única y exclusivamente por su culpa, acostumbrado a Gran Bretaña, al bajar de la acera miró en la dirección equivocada y no se percató de que se acercaba un automóvil.
El británico accidentado no era otro que Winston Churchill, el hombre que dirigió los designios de Gran Bretaña durante la Segunda Guerra Mundial, que tuvo que posponer su gira de conferencias por los Estados Unidos. Aún así decidió convertir su experiencia en un artículo de periódico.
En este telegrama le pide a su amigo, el profesor de física Frederick Lindemann, de la Universidad de Oxford los cálculos de la fuerza exacta del impacto, para incluirlos en su articulo.
Esto ocurrió mucho antes de que el inglés estuviera al frente de Gran Bretaña contra los nazis. ¿Qué habría pasado si aquel día hubiera muerto atropellado? ¿Cómo habría cambiado la historia de Europa? Puede que nada o puede que mucho.Esta conjetura sobre la muerte de Churchill este fatídico día de 1931, fue tomada como punto de partida el videojuego en primera persona de 2008 Turning Point Fall Of Liberty, en el que, curiosamente, tomamos el papel de un taxista neoyorquino.
El juego aprovecha este escenario alternativo para recrear un contexto histórico diferente en el que Europa se rinde ante Hitler en 1940 y los Estados Unidos no entran en guerra hasta la invasión alemana de la costa este en 1953.
Para saber más:
Wikipedia
International Churchill Society
Biografías y vidas
Anatomía de la Historia