"Hoy se ha constituido en el Congreso la Ponencia para reformar la Ley de Seguridad Ciudadana. Aquí el akelarre de Ponentes que la impulsan/apoyan", escribió Macarena Olona en su cuenta personal de Twitter, uniendo al texto una foto, tomada por ella misma, donde aparecen los miembros de la mesa que discutía esa ley.
Podemos quiere denunciarla por odio, mientras la diputada de VOX les reta a que lo hagan porque sabe que España entera se desternillará de risa discutiendo si en realidad los partidos unidos en torno al sanchismo son o no son un auténtico akelarre de brujos y brujas, presidido por un macho cabrío.
Podemos dice que la finalidad de ese twist era "crear un clima social de odio hacia dichos ponentes por el mero ejercicio de sus funciones parlamentarias". Los defensores de Macarena Olona dicen que el texto y la foto emanan de su libertad de expresión y de sus funciones como diputada de la oposición.
Pero la clave de este asunto es discernir si los partidos que apoyan al sanchismo, donde se mezclan comunistas totalitarios, socialistas degradados por el sanchismo, partidarios del terrorismo etarra, golpistas e independentistas vascos y catalanes, muchos de ellos con el denominador común del odio a España, merecen o no ser considerados un akelarre.
En la imagen que publicó Olona se encuentran los partidos encargados de la ponencia sobre la reforma: el líder del PCE y secretario de Estado de la Agenda 2030, Enrique Santiago (Unidas Podemos); Ismael Cortés (Unidas Podemos); María Carvalho Dantas (ERC); Francisco Aranda (PSOE), Mikel Legarda (PNV) y Jon Iñarritu (Bildu).
En el texto enviado a la Mesa del Congreso, Podemos solicita una sanción a la diputada y asegura que «no consta que la diputada Macarena Olona tenga la condición de informadora gráfica autorizada». Además, le acusan de «alentar campañas ofensivas, de odio y señalamiento público hacia los diputados» que aparecen en la fotografía, «generando con todo ello un clima social que puede acabar en episodios de violencia»
Como es habitual, las huestes de la izquierda han inundado las redes con la palabra "fascista", lanzada contra la diputada de VOX, pero, a juzgar por los resultados, el twist ha dado en la diana porque se ha convertido en viral, en motivo de conversaciones y tiene muchos miles de me gusta y de reproducciones,
No se puede dudar que el concepto "akelarre" resume con claridad meridiana lo que millones de españoles piensan de los partidos que apoyan a Sánchez en el gobierno, reunidos sólo para sostener la presencia de Sánchez en la Moncloa, sabedores de que el presidente les está haciendo el juego sucio de destrozar España y compensándoles su apoyo con privilegios, concesiones y dinero, en detrimento de otras regiones españolas.
Esa unión en torno al sanchismo de partidos nacionalistas extremos, independentistas, golpistas, pro terroristas, mercenarios y totalitarios no es en realidad un akelarre, ni un pandemónium, pero se le parece mucho.
Francisco Rubiales
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