¿Hay vida después de Juan Carlos I?

España

Publicado el 2 octubre, 2013 | por Miguel Ángel Luque

“El Rey es duda para el Mundial” comentaba irónicamente un usuario de la conocida red social Twitter hace unos días, tras conocerse que Su Majestad Don Juan Carlos I tendría que, una vez más, pasar por el quirófano por problemas con su cadera, lo cual ha supuesto la segunda intervención quirúrgica a la que se enfrenta el monarca en lo que llevamos de 2013, tras ser operado el pasado mes de marzo de una Hernia Discal en la clínica de La Milagrosa, en Madrid.

Y como no podía ser de otra forma, no ha tardado en causar una nueva polémica el estado físico de Don Juan Carlos, quien a sus 75 años, no pasa por su mejor momento ni de salud, ni familiar, ni ante la opinión pública, tras vivir un año donde sus accidentadas cacerías de elefantes, sus amistosas relaciones con princesas alemanas y la imputación penal de su hija ante un presunto delito cometido por su marido, han incrementado las voces que piden que ha llegado el momento de que Su Majestad pase a engrosar las filas de jubilados afiliados a la Seguridad Social.

Y en ese punto es donde llegan los primeros interrogantes. ¿Hay vida después de Juan Carlos I? La lógica y la Constitución de 1978 dicen que una vez fallezca, abdique o esté inhabilitado su Majestad, sería su hijo Felipe de Borbón, Príncipe de Asturias, el que debería subir al trono, quien a sus 45 años parece más que preparado para asumir las tareas de su progenitor, especialmente cuando este ya no se encuentra en condiciones de realizar muchas de ellas, lo que ya ha motivado que el Príncipe Heredero venga de un tiempo a esta parte sustituyendo a su padre en varios actos oficiales. ¿Por qué, entonces, no ha abdicado ya Don Juan Carlos?

Quizá el Monarca es plenamente consciente de que no se encuentra en el mejor momento para iniciar el debate que supondrá su retirada, especialmente por el momento crítico que atraviesa la Casa Real. Además, a poco que el Rey disfrute aún de lucidez suficiente, comprenderá que pese a que la Constitución está a favor de que su hijo continúe la dinastía monárquica, hay una generación entera de jóvenes que se han encontrado con un texto constitucional y unas instituciones que ellos no votaron, ni han aceptado. Y que quizá podrían haberlo hecho si estas no hubieran afectado a su día a día, pero la vorágine de escándalos que han sacudido a su persona, su familia y en especial su yerno durante los últimos meses han llevado a que nos encontremos, con toda seguridad, en el momento de la Democracia donde menos apoyo podría encontrar la Monarquía. O lo que es lo mismo, un muy mal momento para iniciar el debate sucesorio.

Llegados a este punto, cabe preguntarnos ¿Agotará Juan Carlos su reinado? ¿Continuará Su Majestad al frente del título de Jefe de Estado hasta que su salud le impida completamente cualquier tipo de actividad, o veremos pronto su abdicación en favor de su hijo? Y de producirse esto último, ¿Cómo reaccionará la sociedad española ante la continuación de una institución medieval como es la Monarquía, cuyos méritos empiezan a ser bastante discretos, en comparación con las cada vez más dudas, rechazo e incluso vergüenza ajena que está provocando en los últimos tiempos? Tenemos por delante cuatro meses de recuperación hasta que Don Juan Carlos pueda reincorporarse a su rutina oficial al frente de la jefatura del Estado. Tiempo suficiente para dar respuesta a algunas de estas preguntas que han surgido a raíz de su operación.

Parece descartado que Juan Carlos llegue a estar disponible en la lista de Del Bosque para el mundial. Pero, ¿llegará para ver a su hijo reinar, o para ver a los españoles invitarles a abandonar la corona?