Esta canción fue el primer número 1 de Elvis Presley en las listas –permaneció nada menos que 27 semanas en el Top 100–. Sus autores se inspiraron en una noticia que apareció en el Miami Herald sobre el suicidio de un hombre en un hotel, que dejó una nota en la que se leía: “Camino por una calle solitaria”. De aquí, surgió la idea del “hotel de los corazones rotos” que se encuentra, según la letra, “al final de una calle solitaria”.
Aunque Elvis no contribuyó en la letra, su representante consiguió un trato de lo más lucrativo: a cambio de que la grabara, lo incluyeron en los créditos. Los autores habían intentado convencer a The Wilburn Brothers, pero estos rehusaron (una decisión a todas luces errónea, ya que fue uno de los temas más vendidos de aquel año). En 1995, entraría a formar parte del Salón de la Fama de los Grammy.
En primer lugar, la versión original de Elvis Presley, grabada en enero de 1956 y sin duda la más exitosa. Chet Atkins interviene a la guitarra y Floyd Cramer al piano.
Roger Miller la versionó en su álbum Words and Music (1966).
Merle Haggard la incluyó en su álbum de tributo a Elvis Presley, My Farewell to Elvis (1977).
La versión de Willie Nelson y Leon Russell llegó al número 1 en 1979.
Incluso Bill Clinton, antes de convertirse en presidente, la interpretó en un solo de saxo tenor en 1992.
El grupo de rock sureño Lynyrd Skynyrd hizo su correspondiente versión en Endangered Species (1994).