Con la llegada del verano lo que más me apetece son cosas frías para comer. Ya sea en el desayuno, la comida, la merienda o la cena, en Barcelona rondan los 30 grados y hace mucho, muchísimo calor. Me encanta acompañar mis comidas de ensaladas o beber un gazpacho bien frío, preparar limonada o beber batidos con todas las frutas que haya en la nevera.
Las combinaciones de frutas para hacer batidos son ilimitadas pero para la receta de hoy sólo he usado melocotón y leche de avena. Es una mezcla entre helado y batido pero la textura puede cambiar en función de la cantidad de leche de avena que agreguemos. Obviamente podéis utilizar la leche que queráis, yo utilizo leche de avena porqué es la que suelo comprar en casa.
El melocotón lo podéis cortar y congelar vosotros mismos la noche anterior o 2-3 horas antes de preparar el helado. Yo tenía melocotón congelado que compré en año pasado en La Sirena. Habíamos comprado melocotón, piña y melón congelado pero el melocotón siempre se quedaba al fondo del congelador así que decidí usarlo para algo bueno y productivo 😉
Es una receta muy muy fácil de hacer y es perfecta para empezar el día con energía, aunque también me gusta para merendar o para comer a media mañana. Se prepara igual que el helado de plátano y el resultado es igual de bueno!
Espero que os guste y lo disfrutéis pronto
Ingredientes:
- 300gr de melocotón congelado o 2 melocotones cortados y congelados
- 1 vaso de leche de avena
Instrucciones:
Mezclamos los ingredientes y batimos hasta que quede cremoso. ¡Listo!