Aunque resultan muy llamativas y preocupantes, es normal que muchas mujeres embarazadas sufran hemorragias nasales. En la mayoría de casos se deben a que, por una parte, se incrementa el flujo sanguíneo y, por otra, el nivel de estrógenos aumenta hasta en un 50%. La combinación de ambos factores hace que sea más fácil la aparición de hemorragias en esta zona.
Causas de la aparición de hemorragias nasales
Lo más habitual es que las hemorragias vayan acompañadas de congestión nasal, con lo que la sensación es realmente molesta para la mujer, ya que la nariz se tapa y la respiración se vuelve más complicada.
Además de tener una congestión nasal, existen otros factores que precipitan la aparición de una hemorragia en la nariz.
Tener hipertensión arterial o dificultades de coagulación sanguínea facilita el sufrir este problema, al igual que padecer de sinusitis o alergias.
Qué hacer ante una hemorragia nasal
Muchas mujeres embarazadas tienen congestión nasal desde el segundo mes de gestación hasta el final, con lo que es importante saber qué se puede hacer ante la aparición de una hemorragia nasal.
Hay que empezar por mantener la cabeza más alta que el corazón, y presionar de manera continua los orificios de la nariz contra el tabique. Cuando la hemorragia se acabe, basta con aplicar una pequeña bola de algodón en el orificio. Esta operación no debe durar más que unos minutos. Aplicar hielo también ayuda, ya que de esta manera se reducen los vasos sanguíneos. Eso sí, nunca hay que inclinar la cabeza hacia atrás, porque esto puede provocar que se trague la sangre.
Si después de 20 minutos de hacer presión la hemorragia no se ha detenido, hay que avisar a un médico. De igual modo, hay que consultar al especialista si la hemorragia es muy abundante, o se repite muy a menudo. El podrá confirmar que no existe ninguna causa más que la provoque, a parte del embarazo.
Remedios para las hemorragias nasales
Las hemorragias nasales están estrechamente relacionadas con la congestión nasal, con lo que cualquier remedio que ayude a aliviarla resulta positivo a la hora disminuir la frecuencia de las hemorragias nasales durante el embarazo.
Usar humidificadores, evitar los ambientes demasiado cargados, rehuir el tabaco y el alcohol son algunas de las medidas básicas para que una embarazada pueda respirar mejor, y no se sienta tan congestionada.
Medidas para prevenir las hemorragias nasales
Los médicos recomiendan una serie de pautas que ayudan a una mujer embarazada a reducir sus hemorragias nasales al máximo.
Para empezar, es importante que beba mucho líquido, ya que de esta manera su mucosa estará siempre bien hidratada. También debe intentar evitar la sequedad nasal usando suero fisiológico como el que emplean los niños, ya que los descongestionantes nasales en exceso irritan la nariz aun más. De igual modo, hay que tener en cuenta que la sequedad es la mejor amiga de las hemorragias, así que una buena opción es evitar la calefacción excesiva e, incluso, colocar un humidificador.
Finalmente, resaltamos dos trucos básicos para evitar provocar hemorragias nasales: sonarse siempre la nariz suavemente y procurar mantener la boca abierta al estornudar.