Revista Regiones del Mundo
Henry O'Neal Dehane Segrave (1896-1930), piloto británico de automovilismo que se hizo famoso por sus récords de velocidad en tierra y agua, además de ser el primero que rompió la barrera de los 320 km/h. Segrave nació en Baltimore, Estados Unidos, de padre norirlandés y madre americana. Durante la I Guerra Mundial fue piloto y agregado aéreo en Estados Unidos. Después de la guerra entró a formar parte del equipo de la escudería Sunbeam Talbot-Darracq ganando 31 de las 49 carreras en las que participó con los Sunbeams. En 1927 comenzaron sus tentativas por batir récords en tierra y agua. En aquel año, en Daytona, Estados Unidos, estableció un récord mundial de velocidad en tierra de 327.96 km/h en un Sunbeam y dos años más tarde alcanzaría los 372.47 km/h con un Irving Napier de 23 litros llamado Golden Arrow. Segrave fue nombrado caballero en 1929, un año antes de matarse en el lago Windermere (en el distrito de Lake, Inglaterra) mientras intentaba mejorar su propio récord sobre agua de 157.71 km/h. Su lancha, Miss England II, se golpeó contra un objeto oculto en el agua.