Decidí leer este libro únicamente por los caracteres del reto y porque los libros sobre cavernícolas me suelen gustar (Los hijos de la Tierra, En busca del fuego…). Pero con este me he llevado una decepción.
Trata sobre una tribu de esquimales que viven en Norteamérica, casi entre la zona de tundra y el hielo mismo. Son nómadas y su alimentación se compone de carne de reno y de foca. Temen a los espíritus, tratan bastante bien a las mujeres de la tribu (pueden decidir si quieren o no a un compañero), y es curioso cómo ansían conocer nuevos territorios de caza. Lógicamente los meses de invierno son más sedentarios y viven en iglús puesto que no hay luz del sol, y cuando comienza el verano es cuando parten a descubrir nuevos lugares. Son agresivos cuando se encuentran con extraños, aunque a veces comparten asentamientos.
El caso es que todas estas historias me gustan: me gusta saber cómo cazan, cómo encuentran a los animales y se enfrentan a la muerte y a las enfermedades pero, en mi opinión, el autor no ha sabido contar bien la historia. Se detiene en contar algún detalle de la tribu y luego pasa directamente a otro episodio sin ton ni son, como una serie de anécdotas casi sin hilo conductor.
Mi personaje preferido era el hermano de Heq (el protagonista y mejor cazador de la tribu), que era medio hombre-medio mujer: él físicamente era hombre, pero unas veces sentía como hombre y otras como si fuera mujer. Así que se empareja con una mujer que muchas veces tiene que actuar como hombre para compensar. Cuando ella iba a parir: él se fue con ella al bosque, y los dos en cuclillas parieron “juntos”; decía que ella llevaba al bebé en su interior, pero a él le daban los dolores del embarazo. Vamos, que estaba muy divertido este personaje.
Pero bueno, que no lo recomiendo.