Esta historia arranca así: "Estoy en Europa pero yo no quería venir a Europa". Ibrahima Balde nació en Guinea, pero se vio forzado a abandonar su casa para ir a buscar a su hermano pequeño. No salió para perseguir un sueño. Abandonó su hogar para encontrar a la persona que más quería. Es imposible no llorar varias veces durante la lectura de este libro. Pero no solo por la crudeza de esta odisea a través de fronteras y desiertos y océanos. Sino también, y sobre todo, por cómo está contada: con una mirada ingenua, castigada, arrebatadoramente poética y, en definitiva, única. La de quien ha sufrido todo y, sin embargo, tiene el poder de convertirlo en algo útil. En algo bello.
Solía sentarme junto a mi hermano y le hablaba, como ahora te hablo a ti. Le hablaba con la boca y con los ojos. Así las palabras no se caen.
Antes de los escritores están las personas. Antes de las novelas, las historias. Antes de las imprentas y los libros, las crónicas y mitos alrededor de la hoguera.
Hermanito es literatura viva, por lo que tiene de vivencial y humano, pero también por lo que tiene de popular y oral. El encuentro entre Amets e Ibrahima no es solo el encuentro y la posibilidad de fruto entre dos personas sensibles. Es, también, la suma de dos culturas y de dos poéticas. Somos como nos explicamos. Nuestra cultura es, también, cómo sentimos lo que vivimos. Ellos estaban destinados a encontrarse y a entenderse: por muy lejos que crecieran el uno del otro, estaban cerca.
Amets es bertsolari, campeón de Euskadi, e Ibrahima viene de la tradición oral de Guinea Conakri. De ese encuentro, de esa conversación, de esa oralidad, de esa cultura popular hecha sentimiento, vida y palabra, nace este libro y se forja, también, su amistad.
Editorial: Blackie Books
Formato: Tapa dura / Versión Kindle
Este es un libro escrito por Amets Arzallus Antia con las palabras de Ibrahima Balde de 136 páginas que he tenido que dosificar en un par de días por la crudeza de la historia.
La obra nos da unas pinceladas de la infancia de Ibrahima hasta que con 13 años pasa a ser el hombre de la casa y tiene que cuidar de su hermano, sus dos hermanas y su madre. Él quiere darle la oportunidad a su hermano de poder estudiar y no acabar trabajando como él pero un día su madre lo llama y le dice que su Miñan se ha ido.
Aquí empezará una búsqueda de Ibrahima desde Conakri que es donde vive su familia hasta Libia que es donde está su hermano. Él pretende hablarle "con la boca y con los ojos, para que las palabras no se caigan". Un viaje que aunque quisiéramos seguirlo por Google maps no podríamos. Un viaje donde lo que tuvo que aguantar Ibrahima es inhumano pero también encontrará a gente que le ayudará. Y no voy a contar más porque mientras escribo estas palabras me emociono además que considero que es una historia que hay que conocer, no se puede mirar hacia otro lado.
Es un libro muy duro, todos podemos hacernos una idea de lo que los migrantes deben pasar para llegar hasta aquí pero si supiéramos la realidad, los monstruos que hay alrededor del mundo...
Esta es la historia de Ibrahima, una historia real, un hombre al que le atacan los recuerdos todos los días. Un libro que te cambiará. Él no está aquí porque quería alcanzar un sueño... él está aquí porque quería encontrar a la persona que más quería.
Si quieres hacerte con un ejemplar lo puedes hacer desde el siguiente enlace: Hermanito: Miñán