Revista Cine

Hermosa juventud (2014)

Publicado el 06 junio 2014 por Rugoleor @rugoleor

Póster: Hermosa juventud (2014)

Natalia (Ingrid García Jonsson) y Carlos (Carlos Rodríguez) son dos jóvenes enamorados de 20 años, que luchan por sobrevivir en la España actual. Sus limitados recursos les impiden avanzar como les gustaría. No tienen grandes ambiciones porque no albergan grandes esperanzas. Para ganar algo de dinero deciden rodar una película porno amateur. El nacimiento de su hija, Julia, será el principal motor de sus cambios.

Calificación: 6,655.

Tráiler de la Película

Ficha:

Título Original: Hermosa juventud.
Director: Jaime Rosales.
Guionistas: Jaime Rosales, Enric Rufas.
Intérpretes: Ingrid García Jonsson, Carlos Rodríguez, Inma Nieto, Fernando Barona, Juanma Calderón, Patricia Mendy, Miguel Guardiola.
Productores: Jérôme Dopffer, José María Morales, Jaime Rosales.
Fotografía: Pau Esteve Birba.
Música: Juan Gómez-Acebo.
Montaje: Lucía Casal.
Dirección Artística: Victoria Paz Álvarez.
Diseño de Vestuario: Beatriz Robledo.
Países: España, Francia.
Lugares de Rodaje: Madrid (España).
Fechas de Rodaje: De 18-11-2013 a 21-12-2013.
Año: 2014.
Duración: 100 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 16 años.
Género: Drama.
Estreno: 30-05-2014.
DVD (Venta):
Distribuidora: Wanda Visión, S. A.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España.
Espectadores: 0.
Recaudación: 0 €.
Visitas: 4.

Fotograma: Hermosa juventud (2014)

Crítica:

06-06-2014 – JOSU EGUREN

Extrarradio

Tomando como pie una de las reflexiones contenidas en ‘Prendre soin (De la jeunesse et des générations)’, del filósofo francés Bernard Stiegler: la juventud es el futuro del hombre, y, según afirma el propio Jaime Rosales, “Hermosa juventud” no nace con la intención de negarlo, aunque su quinto largometraje bien podría confundirse con el retrato desolado (y desolador) de una pareja de jóvenes atrapados en un presente sin esperanza. La maquinaria cinemática de Rosales, que afloja la tensión dialéctica que ha marcado su filmografía para contagiarse de la cercanía de un barrio marginal, abandona los experimentos con la radicalidad audiovisual para abrazar los cuerpos de una pareja que desciende de un árbol genealógico en el que destaca “Los años verdes” (1963), de Paulo Rocha, como su gemelo ibérico en la distancia. Sobre los “Surcos” (1951), de José Antonio Nieve Conde, Rosales se abre camino hacia una realidad periférica incorporando al lenguaje elementos tecnológicos que le permiten viajar en el tiempo mediante elipsis escenificadas sobre la pantalla de un teléfono móvil, lo que a su vez amplifica la extraña musicalidad de una película desprovista de una banda sonora incidental.

Los defectos de “Hermosa juventud” aparecen cuando la voluntad del autor, que a pesar de los numerosos cambios de lente y formato es capaz de fingirse invisible en los espacios cerrados, entra en juego para decidir con excesiva arbitrariedad los elementos que entrarán a formar parte de las secuencias que se deciden en el contraste entre el plano y el fuera de campo. Brillante en la dirección de actores -Ingrid García Johnson es el mayor descubrimiento de la película-, Rosales encuentra su mejor a aliado en Nacho Torbe, voz en off de la entrevista previa a una escena porno amateur que, de manera inconsciente, alumbra un subgénero a medio camino entre el cine de combate social, de vientre neorrealista, y el cine de terror contemporáneo pegado a la estética de los falsos documentales.


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