Hernia de hiato

La hernia de hiato es cuando los músculos que controlan la zona que comunica el esófago con el estomago se debilitan y los ácidos del estomago pueden viajar libremente por el esófago causando inflamación en el mismo.
Con la alimentación y cocina sana se puede prevenir o disminuir el riesgo de que aparezca la hernia de hiato. Pero se deberá ir al médico puesto que conlleva un tratamiento médico con medicinas que neutralizan la acidez provocada por el estomago. Habrá que evitar comidas copiosas, no acostarse justo después de comer, ni agacharse exageradamente después de las comidas, reducir el peso en el caso de que se exceda del peso ideal para no influir en la hernia de hiato y sobretodo no fumar.
En una cocina sana se aconseja estos alimentos para la hernia de hiato son los lácteos bajos en grasa como la leche y yogures semi o desnatados, quesos frescos y quesos cremosos bajos en grasa. Carnes con poca grasa, pescado blanco, huevos revueltos o en tortilla, y fiambres de pollo o pavo. Los cereales, las legumbres y las papas, salvo algunos que solo se deberían consumir muy esporádicamente como los cereales con chocolate, el pan fresco recién horneado tipo baguette y las galletas rellenas o bañadas con natas de sabores, y soluciones azucaradas. Las verduras son buenas, pero habrá que evitar las que producen flatulencias. Las frutas frescas, muy maduras y no ácidas. Agua sin gas, caldos, e infusiones suaves. Aceite de oliva y de semillas, mantequilla o margarina y mahonesa light.
Los alimentos para la hernia de hiato que se recomiendan consumir moderadamente sonla leche entera y postres con leche, carnes con grasa, pescado azul y jamón serrano, así como los cereales del desayuno azucarados. Miel, gelatina de frutas, frutos secos y helados.
Los que solo se pueden tomar en casos esporádicos, una vez cada mucho tiempo... Son la leche condensada, quesos fuertes y postres con natas. Carnes con mucha grasa y fibrosas como la del conejo, carne hervida dos veces, embutidos demasiados grasos, huevos duros y pescados en lata, en escabeche. La fruta no madura, demasiado ácidas, en almíbar o confitadas.