Hialuronidasa: el antidoto frente al relleno

He tenido una complicación en la consulta. Hace unas semanas inyecté a una paciente ácido hialurónico en las arrugas del párpado inferior. A la semana valoré a la paciente: las arrugas del párpado inferior derecho habían mejorado mucho. Pero en el lado izquierdo se había formado una especie de inflamación que dejaba la zona estéticamente peor que antes de empezar el tratamiento.  
Lo que había ocurrido es que al inyectar ácido hialurónico en la zona, éste había absorbido agua de forma excesiva, y al ser un área tan sensible como es el párpado, la zona quedó hinchada.   Encargué Hialuronidasa en la farmacia. La hialuronidasa no está comercializada en España sino que hay que conseguirla a través de fórmula magistral. La inyecté en la zona y….¡de forma inmediata la inflamación desapareció!   Era la primera vez que yo usaba hialuronidasa en la consulta y me asombró la enorme eficacia que tiene esta sustancia. Normalmente no necesitamos eliminar depósitos de ácido hialurónico ya que si lo usas de forma apropiada es raro que existan complicaciones. Pero hay que tener en cuenta que el efecto hidrofílico que tiene el ácido hialurónico, es decir, captador de agua, es interesante si lo inyectas profundo ya que da volumen a la zona, pero si se inyecta superficial o en zonas laxas como los párpados puede dar lugar a inflamaciones locales que duran meses.   El ácido hialurónico es un relleno fantástico. Es seguro, es natural, desaparece en menos de un año, estimula la producción de colágeno y además los médicos poseemos un antídoto para poder eliminarlo inmediatamente si queremos.   Me ha parecido interesante compartir esta complicación que he tenido por si algún paciente ha tenido este problema con el ácido hialurónico. Si fuera así, lo correcto sería acudir a su médico y que valore la eliminación del ácido hialurónico no deseado mediante hialuronidasa.
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