Este es el grito que lanza Dawn Setefanowic, a los Estados Unidos, ante la decisión del Tribunal Constitucional de legalizar el matrimonio homosexual en todos los Estados de la Unión.
Ella vive en Ontario (Canadá), con su marido y sus dos hijos. Ha sufrido en sus carnes lo que supone haber sido criada por una pareja de homosexuales. Su padre gay murió de sida. Su libro, Out From Under: The Impact of Homosexual Parenting ha tenido un gran impacto.
"Cuando los niños pierden a un padre
biológico a causa de la muerte, el divorcio, la adopción o la tecnología
reproductiva artificial, experimentan un vacío doloroso. Es lo mismo
para nosotros cuando nuestro padre o madre gay introduce en nuestra vida a su pareja del mismo sexo que no podrá nunca sustituir a nuestro padre o madre biológicos".
Lo mejor es leer el testimonio de Dawn, que Religión en Libertad pone a nuestra disposición. Vale la pena leerlo con atención, para no dejarse manipular por tanta publicidad encubierta, con la que el lobby gay tiende a intoxicarnos.
Más que DESPERTAD, el título de su mensaje bien podría ser DESERTAD de lo políticamente correcto, sin miedo a llamar a las cosas por su nombre.