Ayer buscaba en Youtube algo sobre el embarazo, y encontré el video de una adolescente que hace a su mamá la broma de decirle "estoy embarazada". Vi ése y no sé cuántos más, con las variantes: hija le dice al papá, hijo le dice a la mamá, hijo le dice al papá; hasta vi a unas hermanas y a una chica con una tía.
Quedé impresionada con las reacciones de la mayoría de los papás y las mamás. Lo primero que salta a mi vista es un afán de "deshacerse del problema". Luego, el machismo en toda su expresión. Después: la agresión.
Papás y mamás de diferentes países coinciden en empezar con: "¿Pero tú estás loco(a)? ¿Qué tienes en la cabeza?" Vale. De ahí en adelante, viene una serie de groserías.
Se trata de chicos o chicas de trece a dieciséis años, más o menos, así que no es para que los papás suspiren y sonrían. Pero no sé si me explico: el lenguaje florido no estaba expresando la consternación de los papás ante la situación, era parte de una agresión ofensiva. Por otra parte, creo que la reacción más madura que vi, fue de un papá que tiene la gracia de decirle al chico algo así como "ahora vas a ver: le voy a decir a tu mamá". No es que me parezca abominable que los papás consideren la opción del aborto o que tengan en cuenta que el futuro nieto podría no ser hijo del hijo, es que la actitud que sostenía las expresiones, sí era terrible. Una mamá casi lo primero que le dice a la hija es: "¡No lo vas a tener!" Y cuando es un chico, no solamente los papás, las mamás, mujeres -valga la redundancia- razonan alrededor de la premisa "el embarazado no es él".
No vi apoyo. El modo de dar mensajes en el sentido "ahora tendrás que hacerte cargo", parecía más bien una prisa de los padres por desembarazarse ellos del asunto, frente al miedo de que, si no lo logran, terminarán ellos haciéndose cargo.
Vi modos de relación, por decir lo menos, bien poco respetuosos. A los chicos debe parecerles normal, puesto que al final se ríen y han subido el video como algo gracioso. Pero qué triste debe sentirse una quinceañera que encima de lo que tiene encima, pasa por esa reacción de su mamá. Qué solos deben sentirse los que lo dicen porque es cierto, y tienen esas familias. En serio pensé que hace falta la presencia de Dios.
Silvia Parque