Revista Política

Historia de Roma I: Monarquía y República

Publicado el 20 julio 2016 por José Alfonso Pérez Martínez

No es fácil saber cuándo se fundó Roma. Cuando los romanos empezaron a preguntarse sobre los orígenes de su propia ciudad decidieron que había sido fundada por Rómulo, su primer rey, descendiente de Eneas, héroe de la guerra de Troya, en el año 753 antes de Cristo. En realidad no se sabe en qué año exacto se fundó, y tampoco sabemos cuánto de real y cuánto de legendarios tienen los personajes de Eneas o de Rómulo. 
En todo caso parece que en los primeros tiempos de Roma la ciudad-Estado estuvo regida por reyes. La tradición dice que fueron siete, hasta que los romanos expulsaron al último, Tarquino el Soberbio, en el año 509 antes de Cristo. Entonces los romanos fundaron un régimen republicano, en el que dos magistrados elegidos llamados "cónsules" ostentaban el poder supremo durante un año. Los cónsules eran elegidos de entre los ciudadanos más ricos de Roma, o "patricios". Los pobres estuvieron reclamando tener también representantes y al final lo lograron: los representantes de los pobres o "plebeyos" en el Senado se llamaron tribunos. El tribuno del pueblo, o de la plebe, como los cónsules, tenía mucho poder, y su figura debía de ser respetada.
Roma al principio ocupaba muy poco espacio. Con el crecimiento de la población cada vez necesitaron más tierras de cultivo y las lograban venciendo a sus vecinos e incorporándolos al Estado. Lo cual creaba nuevas necesidades de terreno que se solucionaban con nuevas conquistas. Así fueron vencidos los etruscos, los volscos o los samnitas, pueblos que como los romanos vivían en la península italiana. Al final Roma dominó toda la península. Llegó un momento en que chocó contra su primer gran enemigo no itálico: Carthago. Carthago era una ciudad-Estado, como Roma, pero situada en el norte de África. Roma y Carthago chocaron por el dominio de Sicilia y de España (entonces llamada Hispania) en las llamadas guerras púnicas (del 264 antes de Cristo al 146 antes de Cristo). Al final el gran general cartaginés Anibal fue derrotado y Roma se convirtió en la gran potencia dominadora del occidente del Mediterráneo. 
Tras la derrota de Carthago vino una época de inestabilidad: los políticos representantes de los plebeyos y los de los patricios empezaron a luchar por dominar Roma. Se sucedieron dictadores: Sila, Mario... Al final Julio César, un representante del partido del pueblo, logró ser proclamado dictador. César conquistó para Roma la Galia, la tierra que hoy llamamos Francia. Pero César fue asesinado en el año 44 antes de Cristo por un grupo de senadores que temían que César, que ya tenía mucho poder, quisiera aún más y acabara proclamándose rey. En la foto que ilustra este artículo Marco Antonio, amigo de César (interpretado aquí por el actor Marlon Brando), se dispone a mostrar a los romanos el cuerpo de César.
La muerte de César originó una guerra entre sus asesinos y los amigos de César, que éstos acabaron ganando. De esta guerra surgió como nuevo hombre poderoso Octavio, hijo de una sobrina de César. En el año 27 antes de Cristo, habiendo vencido a todos sus enemigos, Octavio añadió a su nombre el de Augusto, un nombre hasta ese momento reservado al dios Júpiter. Octavio Augusto fue el primer Augusto, el primer emperador de Roma. Empezaba así una nueva etapa, que trataremos en el próximo capítulo. 
-JAPM-
Historia de Roma I: Monarquía y República

Volver a la Portada de Logo Paperblog