Lo cierto es que siendo el reflejo en libro de una cuenta dedicada a crear memes históricos, esperábamos encontrarnos una mera recopilación de sus grandes éxitos y algunas novedades más, pero nada más lejos de la realidad. Historia en meme (el libro) resulta ser todo un recorrido a lo largo de la historia de la humanidad, con mucho más texto y reflexión del que cabía esperar.La conclusión a la que hemos podido llegar es que se trata de un libro completamente afín a las publicaciones que nosotros mismos vamos haciendo. De hecho es un libro que bien podría estar escrito por nosotros mismos si atendemos a los objetivos que el propio autor expresa en la introducción y que se desprenden a lo largo de toda su lectura. Os enumeramos los motivos por los que nos ha gustado tanto y por los que compartimos al 100% sus intenciones:
Ilustración del interior del libro.
1. Es un libro que cuenta la historia con humor, muchísimo humor. No solo por los memes e ilustraciones que salpican todo el libro, sino también por los continuos chistes, juegos de palabras, anécdotas a lo largo del texto. En realidad esto es lo menos que esperábamos de su autor, pero hace un recorrido tan completo y riguroso a los distintos períodos históricos, que vuelve a poner sobre la mesa lo que nosotros llevamos años gritando: se puede hacer historia con humor sin renunciar al rigor.2. Es un libro que no solo cuenta la historia, sino que reflexiona sobre ella. Lo hace a lo largo de todas las páginas, pero hay unos capítulos iniciales que merecen mucho la pena, pues en ellos, de nuevo con humor, reflexiona sobre la idealización (lo que nosotros hemos denominado en muchos sitios como romantización) de la historia, y sobre la utilidad de la historia.Ilustración del interior del libro.
3. Es un libro crítico y con mucha libertad. A lo largo de todo el texto va haciendo alusiones a formas terribles de hacer historia, a tergiversaciones y malas interpretaciones por parte de historiadores (o mejor, como nosotros decimos, homeohistoriadores), y lo hace con una libertad que es envidiable. No tiene pelos en la lengua, o en la pluma, o no tiene pluma... mira, no sé.4. Es un libro que combate tópicos y prejuicios. Los que ya nos conocéis, sabéis que esta es una de las cosas que más nos gustan, y por eso nos ha encantado este libro, porque se dedica a combatir ideas preconcebidas, tópicos y bulos históricos: que si el derecho de pernada, que si la reconquista, que si Mel Gibson... Maldito Mel Gibson...De hecho, nos hemos visto reflejados en reflexiones como la del racismo que implica pensar que las pirámides las construyeron los extraterrestres.5. Es un libro que pretende hacer rico a su autor. Y nosotros siempre hemos estado a tope con esa filosofía, pero ya anticipamos a su autor que está difícil, aunque él tiene algunas posibilidades más que nosotros porque no tiene que dividir entre tres. Así que quizá él sí que consiga unirse a ese nutridísimo grupo de historiadores multimillonarios.El libro comienza con esos capítulos iniciales que reflexionan sobre la historia y la Historia para, a continuación, pasar a construir un relato en orden cronológico estructurado en capítulos que coinciden con los períodos básicos de la historia: desde la Prehistoria a la Edad Contemporánea. Al final de cada uno de esos apartados tiene dos subapartados recurrentes: el primero es "El cine y..." (...y la Edad Media, y la Edad Moderna, etc.), y en él analiza cómo se refleja ese período en el cine con ejemplos concretos de películas. Hace continuas bromas sobre lo asqueroso que es ver una película de ambientación histórica en compañía de un historiador, pero es que es realmente asqueroso, lo reconocemos. Y el otro subapartado es "Lo que no sabías de...", donde recopila algunos datos curiosos o desconocidos del período en cuestión."Venga, va. Pero no será todo tan maravilloso", estaréis pensando más de uno. Claro que no, pero Guillermo nos ha pagado solo para que hablemos bien del libro... Pero bueno, intentaremos hacer algo de crítica:Hay aspectos del libro que podríamos considerar negativos pero que resultan obvios: por ejemplo, es obvio que en un libro de historia y humor de 140 páginas es imposible contar TODA la historia con TODOS los puntos de vista y todas las aristas. Pero seguro que llegará alguien que diga: "vaya desastre de libro, se ha dejado fuera a la cultura de Paquimé", "vaya mierda, ni una sola mención a la batalla de...", y tendrá razón (o no), pero en su defensa diremos que la selección de contenidos ha sido impecable, y el recorrido, para su brevedad, no puede ser más completo.Por supuesto, ha habido puntos en los que hemos leído alguna cosa que nos ha rechinado y con la que no hemos conseguido ponernos de acuerdo, concretamente sobre el origen de algunas expresiones y términos como "salario" o detalles como la afirmación de que hubo mujeres gladiadoras tan afamadas y ricas como sus compañeros (pero es que justo esta semana habíamos escrito nosotros un post al respecto). Pero eso es lo bueno de estas publicaciones: que invitan al debate sin vomitar sobre quienes piensan distinto, no como otros historiadores...¿Se nos ha repetido esta imagen? Debe haber algún error.
Más grave nos parece que no haya incluido bibliografía, aunque al tratarse de un libro de divulgación, con un carácter tan genérico y que apela al humor, se lo perdonamos.Pero lo que sí que no tiene perdón de Dios o de Marc Bloch es la maquetación. Lo sentimos mucho, pero la maquetación no le hace justicia alguna al contenido. Esperamos que al ser la primera obra, haya margen para que en la próxima tenga una maquetación bien chula y vistosa, porque la merece.Pero ya os decimos que esto son minucias, porque el libro en realidad merece mucho la pena: ameno, reflexivo, divertido, riguroso... reúne todas las cualidades con las que nos gustaría que se hablase de nuestra propia labor. Así que ahora solo queremos conocer en persona a su autor, Guillermo, para hacer una tarde de sofá, mantita y Canal Historia y llorar o reírnos juntos de sus programas.