¡Hola a todas y todos!
Mi nombre es Sequoia sempervirens, pero pueden decirme sequoia. He venido a echar raíces en esta comunidad y a compartir con ustedes aspectos relacionados con mi familia y con la naturaleza en general. En el proceso, me viene bien un dinerito para ayudar a mis hermanas y hermanos a continuar existiendo.
Si me siguen, los sigo. Si me leen y comentan, los leo y comento. Seamos recíprocos. Ese es uno de los valores pilares de mi familia.
Para que me conozcan un poco más, voy a contarles algunas cosas de mi. Puedo llegar a vivir entre 2.000 y 3.000 años, y medir más de 100 metros de altura. Ya imaginarán la cantidad de anécdotas que tiene mi familia y el millar de eventos que hemos atestiguado en el tiempo.
No confundan mi grosor con obesidad. Mi diámetro puede llegar a alcanzar los 8 metros.
Mi lugar de residencia es en Estados Unidos. Allí tengo dos hogares, uno en California y otro en Oregon.
Curiosamente, mi nombre me fue dado por un jefe cheroqui llamado Sequoyah, cuya familia ni siquiera habita en mi localidad. Ellas y ellos están asentados en Alabama, Georgia, Kentucky, Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia.
Amigas y amigos de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) están haciendo todo lo posible para que yo y mi familia continuemos con vida. Actualmente estamos en peligro de extinción, pero ya les hablaré del por qué otro día.
Por lo pronto, creo que ya he dicho suficiente. Si quieren saber algo más de mi, no duden en preguntar.
Espero que en esta comunidad podamos todas y todos reforestar los desiertos del mundo y de las almas.
Abrazos.
