Holding Pattern. Breaking the Silence. Edición Rockarte.

y Rockarte ahora se mete con el rock sinfónico de los yankys Holding Pattern, animando el arte de tapa de su excelente disco "Breaking the Silence". Un disco que merece que un día lo presentemos como se merece en el blog, muy dinámico, melódico, potente, visceral, esto no es sinfonismo pastoral ni nada que se le parezca, esto es un sinfonismo que se asemeja más a lo más efervescente de Genesis pero mezclado con Liquid Tension Experiment. Hoy les traemos un disquito para descubrir de una banda que es totalmente desconocida por acá, rico en hermosas melodías, con una producción maravillosa y una maestría musical majestuosa, con una banda tremenda liderada por un virtuoso desconocido llamado Tony Sapada que muestra sus habilidades como compositor e intérprete (ojo que el tipo recorre su viola muy a lo Holdsworth - Hackett - Morse creando cosas muy virtuosas pero al mismo tiempo melódicas donde las pirotecnias nunca llegan al punto de irremediable saturación). Un disquito que pronto vamos a presentar como se debe en el blog cabeza, este es un adelanto de Rockarte, para que lo vayan disfrutando visualmente y tengan una pizquita de su disco.

Edición Rockarte

Si no podés ver la animación, entrá acá:
https://fb.watch/c_2LWJk5GO/

Sobre el disco en sí, esto es lo que nos dice nuestro eterno comentarista involuntario de siempre:

El ensamble instrumental Holding Pattern fue una de las leyendas olvidadas del progresivo estadounidense de los 70s: con una propuesta concluyentemente influenciada por Camel, el Genesis 76-78, así como por sus coterráneos de Happy the Man y Dixie Dregs (sin el factor country), y bajo la voz cantante del guitarrista Tony Spada (refinado como Hackett, estilizadamente enérgico como Steve Morse), el grupo gestó algunos registros fonográficos que pasaron sin pena ni gloria en el negocio pero que cautivaron a un público de culto. Hoy en día, ese mismo público de culto está de plácemes con el retorno de la banda al negocio fonográfico, aunque no con la formación original íntegra. En todo caso, esta oportunidad es también para empezar a revalorizar el legado musical de Holding Pattern. Este disco contiene material estrictamente nuevo, excepto por un tema viejo que mencionaremos más adelante. HP mantiene su esencia con una frescura adicional que es producto del aumento de polenta que se genera en las interacciones desarrolladas por los músicos.
‘Flying Colors’ abre el disco de forma llamativa, con mucho nervio y una soltura espléndida en el manejo de las estructuras rítmicas sobre las cuales se desarrollan los motivos melódicos. El tema homónimo sigue a continuación, aportando un aire evocador ligeramente menos suntuoso, pero aún con una evidente exhibición de energía. Menciones especiales para el solo de sintetizador que surge en el tercer minuto y el fluido contraste entre los pasajes fuertes y dóciles. ‘Fishbulb’ parece un tema abandonado de HTM interpretado por Colosseum II – a propósito, simpática la cita del tema de “The Simpsons”. También son dignos de mención esos quiebres emersonianos que Tannenbaum crea en sus teclados en la sección final del interludio. ‘Once as One’ nos vuelve a mostrar la faceta más evocativa de Spada & co., ahondando en el terreno de las sonoridades melancólicas con mayor fruición que en ‘Breaking the Silence’. Tras el fade-out con el cual concluye el tema, la continuación no puede ser más eficaz que con ese comienzo shred que abre ‘Out the Other’, una pieza típicamente moderna dentro del disco: aquí la esencia progresiva se matiza con la apertura a tendencias tipo Satriani, eso sí, elaboradas con tan buen gusto que las pirotecnias nunca llegan al punto de irremediable saturación. A ratos parece como si algún duende travieso hubiese cambiado este disco por otro de Liquid Tension Experiment...
‘Back to the Tunnels’ regresa a la temática de los túneles que ya se había plasmado en ‘Tunnels’ y ‘Out of the Tunnels’ (en su mini-LP homónimo y LP “Majestic”). Su sonido visceral y contundente es como un hervidero donde las llamas de Dixie Dregs, Colosseum II y King Crimson crean una niebla caliente de tensión, una tensión bien manejada por los instrumentistas a lo largo de unos muy bien aprovechados 6 minutos y medio. Hasta ahora, los dos primeros temas y éste conforman los picos del disco. ‘Blaster’ nos devuelve al terreno del rock duro sinfónico pegadizo: siempre viene bien algo de cándida agilidad tras la patente densidad desarrollada en la pieza anterior. ‘Like Waves’ es una pieza lenta, bien dada a atmósferas ensoñadoras creadas por los sobrios diálogos entre guitarra y piano a través de sus simultáneos juegos de arpegios y retazos. Poco antes de llegar al minuto 5 surge un interesante interludio basado en una rara progresión de acordes en las cortinas de teclado, sabiamente complementadas por los flotantes fraseos de guitarra. ‘Honor Before Glory’ es un tema viejo retomado para este renacimiento, con el que se brinda un broche de oro reflexivo al disco. Los fraseos de Spada, muy a lo Morse-mezclado con-Holdsworth, hallan un oportuno soporte en las cortinas de teclado (mellotron y sintetizador de cuerdas).
“Breaking the Silence” es todo un deleite, especialmente para los fans progresivos que aprecian especialmente la línea sinfónica con su buena dosis de energía: Holding Pattern vuelve a surcar los cielos como un ave fénix, pero no saliendo del fuego, sino que la misma ave está hecha de fuego (fuego progresivo).

César Mendoza

Pueden escucharlo completo en music.apple.com

Y acá abajito tienen un video de uno de los temas del disco, para que le cacen la onda...