COMO SE LLEGA A SER DE VERDAD UN HOMBRE.?
Culturalmente se ha establecido y se ha aceptado ciertos comportamientos que en ellos "no se ve mal" y que forman parte de su estereotipo como hombre o masculino; escupir al suelo frente a las personas en las calles sin ningún recato, no llorar y cuidado si lo hace porque eso es de niñas, decir piropos obscenos a las mujeres, ser peliador y violento con ellas, tomatrago y mujeriego, a ser un hombre en el siglo 21, moderno, que sabe lo que quiere, que se respeta así mismo y a los demás, que es buen padre, buen hijo, buen amigo, buen esposo, buen ciudadano, buen hermano, buen Hombre, con un sano control emocional. Esto no es el mundo árabe dónde el machismo reina y no está mal visto pegar a una mujer, esto es el mundo moderno y de la libertad, aquí la definición de hombre adquiere un concepto mucho más claro, inteligente y moderno.
Algunos requisitos se sugieren para ser hombre con una masculinidad y hombria de verdad: Los hombres si lloran: Realmente me indigna la frase que tú haz oído como yo muchas veces; un niño se cae y su madre: “no llores que los hombres no lloran”, un padre ve llorando a su hijo de 18 años y dice: “Los hombres no lloran”. No se si esos padres y madres son conscientes de que reprimir y ocultar emociones, sentimientos no es nada sano, si se reprimen de este modo salen por algún otro lado y algo habitual es que se manifieste en forma de violencia. Un hombre incapaz de llorar y mostrarse triste es más fácil que recurra a la violencia que un hombre que llora las penas y esta triste porque se desahoga en ese momento y no necesita ocultar sus sentimientos como si estuviera haciendo algo malo y seguramente muchos hombres se sienten así cuando lloran, si su padre o algún familiar es un cromañón le habrán repetido una y otra vez: “Los hombres no lloran“, él habrá aprendido a reprimirse y esa represión se manifiesta en forma de violencia, amargura, rabia… Los hombres de verdad si lloran y expresan sus emociones, es algo difícil si haz recibido una educación “machista” y poco a poco aprender a expresar tus emociones como: la tristeza, el miedo…el llanto. Sobre todo las que según los “machos de antaño” consideran que las emociones denotan debilidad, esas son precisamente las que menos hay que reprimir.