Me chifla este apartamento de 40m² en Scandinavia. Es un apartamento coqueto y de estilo 100% nórdico, siguiendo la línea de aportar luz a la vivienda mediante el "abuso" del blanco, pero con una característica que le aporta personalidad a raudales.
El blanco es el protagonista de la vivienda, contrastándolo con ciertos toques de color, también neutro, aquí y allá. Así nos encontramos, tanto en la cocina como en el comedor, con esos tonos blancos confrontados con el color "ladrillo", un ladrillo que se deja ver en las paredes y que igualan con la encimera de la cocina.
Nos encontramos dormitorio y salón bien diferenciados, pero no separados... en 40 m2 no podemos pedir que además nos sobre el espacio o que las estancias sean separadas.
¿Seguimos?
Una cosa que me encanta de estas viviendas, es el aprovechamiento de la luz. Tienen ventanas de lado a lado de las paredes o enormes balcones que incorporan y relacionan exterior e interior. Al mismo tiempo, lo que me sorprende es la capacidad que tienen de hacer una terraza acogedora, en un lugar en el que probablemente sea el último sitio en el que te vas a sentar a leer ó a tomar un té, disfrutando de la luz con el frío que hace...
El invierno es muy duro en estos países y en todas las casas disponen al menos de una chimenea. La chimenea que nos encontramos en esta casa es antigua, con unas velas a modo de decoración para la foto, pero supongo que actualmente en funcionamiento.
La entrada a la vivienda es pequeña pero muy acogedora, el suelo es en madera natural en tonos muy claros como en prácticamente toda la casa. Tiene un pouf - No tan bonito como el de punto que existe en el salón - y un gran espejo con zona de apoyo, que además de ser monisimo es útil para dejar las llaves.
Fotos vía: C´Gil - Décoration
Este post ha sido redactado según el Código de Confianza C0C.