Hormigueo en la cara

El hormigueo es una sensación relativamente frecuente que se da en determinadas zonas del cuerpo, como las manos o los pies, por ejemplo. La causa en la gran mayoría de los casos es la mala circulación. No obstante, el hormigueo en la cara  no resulta tan frecuente. Es por ello que cuando ocurre las personas suelen alarmarse.

Al contrario de lo que puedas pensar, el hormigueo en la cara responde a una gran selección de causas, muchas de ellas de carácter leve. Aún así, es importante prestar atención al tiempo que dura esta sensación y si hay otros síntomas que la acompañan.

¿Cuáles son las causas del hormigueo en la cara?

Ansiedad

Muchos expertos coinciden en que la ansiedad es una de las principales enfermedades del Siglo XXI, tanto entre adultos como entre niños.

Realmente la ansiedad es un mecanismo de defensa que permite al cuerpo enfrentarse mejor a determinadas situaciones ya que mejora el rendimiento. Sin embargo, cuando la ansiedad aparece de forma habitual y no solo cuando es necesario, se convierte en un problema.

En muchas ocasiones, la ansiedad continuada perjudica en gran medida a la calidad de vida del paciente, dando lugar a diversos síntomas físicos y mentales. Una de las señales más comunes es el hormigueo en la cara.

Migraña

La migraña es una de las enfermedades más comunes, especialmente en la población adulta. A pesar de no ser un trastorno grave, sí resulta muy incómodo ya que en ocasiones el dolor de cabeza es tan intenso que impide al paciente realizar cualquier actividad, incluso laboral. La gran mayoría de crisis de migraña duran 3 días, aunque en ocasiones se alargan hasta los 5 o 6 días.

Esta es una enfermedad relativamente fácil de identificar. Las señales a las que hay que prestar atención son: dolor muy intenso en la cabeza, visión borrosa, sensibilidad a los olores, hormigueo en la cara y fotosensibilidad.

Sinusitis

La sinusitis es una enfermedad caracterizada por la inflamación de los senos paranasales, causada generalmente por la gripe. Dicho de un modo sencillo, se produce mayor cantidad de mucosidad de la que el cuerpo puede expulsar, de modo que se queda «atrapada» en esta zona, dando lugar a síntomas como: dolor, fiebre, congestión nasal, pérdida del olfato y mal aliento.

Además, si la inflamación es grande, puede afectar de algún modo a la red de nervios que hay en el rostro, generando así la sensación de hormigueo en la cara.

Malnutrición

Aunque es una causa muy poco conocida por la gran mayoría de la población, la falta de vitaminas sí puede causar hormigueo en la cara, además de otros síntomas. No hay que olvidar que la alimentación es muy importante para que el organismo funciona de manera adecuada.

Son dos las situaciones que pueden generar una situación de este tipo. Por un lado, llevar una dieta pobre, basada en alimentos con escaso valor nutricional. Y, por otro lado, sufrir un determinado trastorno que impida al organismo absorber los nutrientes de los alimentos.

En el caso concreto de las vitaminas del grupo B, cuando el organismo no las recibe en la cantidad adecuada, pueden surgir síntomas graves como mareos, diarrea, confusión, entumecimiento y hormigueo. La razón es muy sencilla: las vitaminas del grupo B participan en un amplio abanico de funciones del organismo, como la producción de glóbulos rojos o la transformación de hidratos de carbono en energía.

Menopausia

La menopausia implica un amplio abanico de cambios en el cuerpo de la mujer. Los síntomas son muy variados: insomnio, cambios de humor, sofocos, sequedad vaginal… Aunque no se hable tanto de ellos, también existen otros como el adormecimiento de la cara.

En este caso el entumecimiento surge a causa de las alteraciones hormonales de la menupausia, que afectan al sistema nervioso y provocan este síntoma. Se trata de una sensación muy molesta, que puede generar ansiedad y mal humor.

Cuando el hormigueo en la cara es un síntoma de la menopausia, en la gran mayoría de los casos el médico recomienda lo que se conoce como la terapia de reemplazo hormonal.

Contractura en las cervicales

Una contractura en las cervicales puede darse por un amplio abanico de causas. Un trastorno muy molesto que puede provocar síntomas tales como dolor, incapacidad para mover el cuello, mareos y náuseas.

Las cervicales son los músculos que se encuentran alrededor del cuello. Por esta zona también transcurren los nervios del rostro, de modo que en ocasiones una contractura de este tipo puede causar hormigueo en la cara.

Neuralgia del trigémino

El trigémino es uno de los nervios faciales, responsable de aportar sensibilidad y controlar la masticación. Cuando hay algún tipo de problema que afecta al nervio trigémino, uno de los síntomas más comunes es el hormigueo en la cara.

Esclerosis múltiple

La esclerosis múltiple es una enfermedad progresiva que afecta al sistema nervioso central. Los síntomas varían entre unos pacientes y otros, aunque el hormigueo facial es uno de los que se da con mayor frecuencia. También es habitual el entumecimiento en manos y pies, así como la pérdida de visión, la fatiga, el balbuceo y los mareos.

Hormigueo en la cara y ansiedad: ¿qué ocurre?

Todas las personas sentimos ansiedad en un determinado momento de nuestra vida: un encuentro con una persona especial, una entrevista de trabajo… Esto es lo que se conoce como ansiedad normal, que se da en ocasiones contadas y cuya intensidad es moderada. No obstante, también puede darse la ansiedad crónica, que se repite de forma constante es muy intensa.

Cuando la ansiedad es constante, se producen un amplio abanico de cambios en el organismo: aumenta la adrenalina, serotonina y neutrotransmisores, afectando así a determinadas áreas del cerebro y del sistema nervioso. Es por ello que el hormigueo en la cara y en la cabeza es un síntoma común de la ansiedad crónica.

Además, hay otros signos que afectan de forma notable a la conducta: llanto fácil, imposibilidad de relajarse, dificultad para comunicarse, pensamientos negativos y obsesivos, etc. Por supuesto, también hay una serie de síntomas mentales: dificultad para concentrarse, sensación de pánico, sentimiento de inferioridad, baja autoestima y cambios de humor.

¿Cómo quitar el hormigueo en la cara?

El tratamiento para el hormigueo en la cara depende en gran medida de cuál sea la causa de esta sensación. Es por ello que resulta tan importante acudir al médico para que establezca el diagnóstico. Si el hormigueo aparece acompañada de dolor, lo más frecuente es que recete analgésicos.

Una de las causas más frecuentes del hormigueo en el rostro es la ansiedad, de modo que el médico también puede recomendar el tratamiento con antidepresivos. Si el origen del problema es la falta de nutrientes, debes tomar complejos de vitamina B, magnesio y calcio.

Esta sensación también puede darse a raíz de la migraña. En este caso, el único tratamiento posible consiste en descansar y dormir lo máximo posible. Además, es aconsejable evitar determinados alimentos como el queso, la cebolla, la naranja, el chocolate y el tomate.

El hormigueo facial se puede originar en la menopausia en el caso de las mujeres. Hay que tomar medicamentos con la hormona estrógeno, como las píldoras anticonceptivas. Más allá de evitar un posible embarazo, este fármaco alivia en gran medida muchos de los síntomas relacionados con la menopausia.

Parestesia facial: ¿qué es y en qué se diferencia del hormigueo en la cara?

El nervio trigémino es el principal nervio sensorial del rostro, encargado de enviar impulsos desde el cerebro hasta a piel y los músculos durante la masticación. Así, si hay cualquier tipo de problema que provoque la compresión de este nervio, es muy probable que se de una pérdida parcial o total de la sensibilidad facial. Esto es lo que se conoce como parestesia en la cara.

Se trata de una sensación diferente a la causada por el hormigueo facial. En la parestesia sientes que tu rostro está dormido y entumecido, total o parcialmente. En cambio, con el hormigueo tienes la sensación de que «bichitos» microscópicos se mueven por tu cara.

Una de las principales causas por las que se da la parestesia es como consecuencia de la extracción de la muela del juicio ya que durante esta intervención se presiona el conducto por donde va el nervio. También puede darse en implante dentales. En este último caso, si la parestesia se acompaña de dolor y migraña, es conveniente retirar el implante.