Hormonas para enamorar

Nuestro cuerpo es sabio y funciona a la perfección en cada momento. Ante cualquier tipo de estímulo exterior, nuestro organismo calienta motores para dar la respuesta más acertada a nuestros instintos. La seducción es un claro ejemplo de ello. Nuestro cuerpo genera de forma natural hormonas que tienen como objetivo convertirse en nuestro mejor aliado a la hora de seducir, enamorar…

Próximos al día del amor por excelencia, San Valentín, en ConTuFamilia queremos compartir los nombres y las características de las denominadas “hormonas del amor”:

La testosterona es la responsable de activar el deseo sexual. Esta hormona está presente tanto en hombres como en mujeres, aunque en menor cantidad en ellas.

Las hormonas del placer se llaman endorfinas. Se trata de opiáceos naturales que secreta la hipófisis y que nos llenan de felicidad, euforia y positivismo.

La oxitocina no sólo es conocida como una protagonista indispensable para el parto, sino también como la hormona del orgasmo. Además, también imprime su positivismo en la vida amorosa en pareja.

Las feromonas son muy estudiadas y son conocidas por utilizarse en cosmética y perfumes con el fin de potenciar nuestras armas de seducción. Muchos perfumistas investigan estas hormonas con el fin de transmitir esa magia de seducción a sus perfumes.

Otra hormona es la DHEA, conocida como la hormona del “emparejamiento”. Esta hormona nos ayuda a la hora de elegir a nuestra pareja y aporta grandes dosis de optimismo y felicidad a nuestro organismo.

La FEA y la serotonina son hormonas del amor, se diferencia una de la otra porque la FEA es responsable de hacernos sentir el amor a primera vista mientras que la serotonina nos invade con sensaciones de parejas estables y amor para siempre. La serotonina nos hace sentir paz interior, tranquilidad, seguridad… ideales para relaciones a largo plazo.

Estas son algunas de las hormonas que activan nuestra seducción y nuestros estados de enamoramiento. Para que el Día de los Enamorados sea vivido y disfrutado los 365 días del año. ¡Feliz San Valentín!