Lo que han hecho es incorporar a los diminutos coches una cámara frontal con la que grabar los recorridos de nuestros bólidos. Además, han añadido una pantalla LCD en los bajos de los mismos con la que podremos ver los vídeos grabados.
Y eso no es todo, puesto que también podremos conectar el coche al ordenador mediante un puerto USB y trasladar los vídeos grabados, la capacidad de grabación es de 12 minutos a 60 imágenes por segundo, a nuestro equipo para editarlos con un software que viene incluido con cada modelo de coche.
Por último, destacar que los Hot Wheels Video Racer, que es como se denominan los nuevos modelos (saldrán al mercado americano en otoño por un precio de 60 dólares la unidad, incluyen una especie de capa protectora, que nos permitirá llevarlos en otros sitios mientras vamos grabando (por ejemplo un paseo en bici).
Vía: Xataka