Revista Cine
Hotel Transilvania 2: la pandilla de Drácula vuelve a la gran pantalla con una monstruosa comedia
Publicado el 22 octubre 2015 por Mumbo @OMasti2012
El próximo viernes 23 de octubre, la pandilla de Drácula vuelve a la gran pantalla para una nueva y monstruosa comedia de aventuras, en la cinta de Sony Pictures Animation "Hotel Transilvania 2". Todo parece estar cambiando a mejor en el Hotel Transilvania... La rígida política de “solo para monstruos” establecida por Drácula para el hotel, se ha relajado por fin y se han abierto las puertas también a huéspedes humanos. Pero, de ataúdes para dentro, Drácula está preocupado al ver que su adorable nieto Dennis, medio humano y medio vampiro, no muestra signos de ser vampiro. Así que, mientras Mavis está ocupada visitando a su familia política humana en compañía de Johnny –e inmersa ella misma en su propio choque cultural– el abuelito Drácula recluta a sus amigos Frank, Murray, Wayne y Griffin para hacer pasar a Dennis por un campamento de “entrenamiento de monstruos”. Lo que no sospechan es que Vlad, el gruñón padre de Drácula, que es de la vieja, pero que muy requetevieja guardia, se dispone a visitar a la familia en el hotel. Y cuando Vlad descubra que su bisnieto no es de sangre pura –y encima que los humanos son ahora bienvenidos en el Hotel Transilvania– las cosas se van a poner complicadas.
"Puede que Drácula sea un monstruo de fama mundial, pero en realidad es un hombre de familia", —asegura el director Genndy Tartakovsky, que ayudó a reinventar a los monstruos clásicos, como Drácula, Frankenstein, el hombre lobo y muchos más, en la comedia de animación de gran éxito “Hotel Transilvania”. La película original de 2012 recaudó más de 350 millones de dólares en todo el mundo y aún mantiene el récord del estreno más taquillero del mes de septiembre de todos los tiempos en Estados Unidos. Y ahora la pandilla de Drácula vuelve, con Tartakovsky una vez más en la dirección. La película empieza con los humanos y los monstruos aprendiendo por fin a coexistir. "Todo marcha bien en el mundo de Drácula", —comenta Tartakovsky—. "Jonathan y Mavis se han casado y han tenido un hijo, Dennis; y eso lleva a la gran pregunta de esta película: ¿es Dennis un vampiro o un humano? Mavis y Johnny están dispuestos a aceptar a su hijo por lo que quiera que sea pero, naturalmente, Drácula espera secretamente que Dennis sea un vampiro. Teme que, si Dennis es humano, Mavis quiera criarlo en el mundo de los humanos y no en el hotel. Así que Drácula pretende hacer cuanto esté en su mano para conseguir que Dennis enseñe los colmillos."Como toda madre abnegada, Mavis quiere lo mejor para su hijo. Por mucho que le encante el hotel (que es, al fin y al cabo, el único hogar que ha conocido) siente que, si Dennis es humano, lo mejor para él sería criarse con otros humanos. Así que, para ver cómo podría ser eso, Mavis deja a su padre al cargo de Dennis mientras ella va con Johnny a visitar a su familia política humana en su ciudad natal de Santa Cruz. Mientras ella descubre los fascinantes usos y costumbres de la vida humana (desde sus 48 sabores de granizados a las tiendas abiertas 24 horas), Drácula está perdiendo un poco la cabeza en el hotel imaginándose su vida sin su hija, lo que no hace sino convencerlo aún más para conseguir que el pequeño Dennis saque los colmillos y darle así a Mavis una razón para no dejar nunca el Hotel Transilvania. La solución de Drácula: un épico viaje por carretera, en el que Drácula y sus amigos no reparan en medios para hacer pasar al pequeño “aprendiz de monstruo” por un completo campamento de entrenamiento de monstruos; sin embargo, sus planes se van al traste cuando el propio padre de Drácula, Vlad, les hace una visita sorpresa."Vlad es un vampiro de la vieja guardia", —explica Tartakovsky—. "Drácula y su padre mantienen una relación muy tumultuosa y contenciosa, no paran de discutir. Vlad no deja de criticarlo y Drácula se pone a la defensiva." Por otro lado, la productora Michelle Murdocca puntualiza: "Vlad es desternillantemente intenso, duro e implacable a ultranza. No le da un momento de respiro a Drácula. Es fácil entender por qué Drácula es como es."
Vlad está interpretado por el mito de la comedia Mel Brooks, uno de los pocos EGOT del mundo (lo que significa que ha ganado un Emmy, un Grammy, un Óscar y un Tony)."Es uno de los grandes pilares de la comedia, está en activo desde hace una eternidad, dio forma a mi sentido del humor y sigue siendo ingenioso y agudo, así que estaba muy nervioso de pensar en dirigirlo. Es asombroso, no es que necesite que lo dirijan", —confiesa Tartakovsky—. "Pero recuerdo que, en cierto momento, quería oír cómo me parecía que debía decir una línea concreta. ¿Qué iba a decirle yo a Mel Brooks?Pero quería que lo hiciera, así que lo hice, y le gustó, y lo hizo igual que yo. Fue un momento increíble para mí, nunca se me olvidará."En la versión española de la película, es el gran Arturo Fernández quien se hace cargo de la voz de Vlad. Un clásico de la escena y el cine español como Arturo Fernández era la elección ideal para este personaje. "Me costó animarme a aceptar el trabajo, no me atrevía en un principio, pero me ha dejado un sabor muy grato y me gustaría repetir la experiencia. El público tendrá mucha curiosidad por oír estas voces incorporadas en la película."Por encima de todo, Tartakovsky asegura que el equipo de la película no ha perdido nunca de vista qué es lo que hace tan especial a 'Hotel Transilvania': "Tuvimos ocasión de redefinir a los monstruos: Drácula, Frankenstein, el hombre invisible, la momia. Constituyen un material estupendo, con el que poder hacer algo muy divertido, caricaturesco, que no se tome muy en serio, y conseguir una película realmente graciosa. Para este filme, me pareció que seguía habiendo una conexión con los personajes y que sería divertido regresar a este mundo y ver cómo sería su siguiente aventura. Así que ese es nuestro objetivo: hacerla divertida, irreverente, fresca y llena de payasadas, pero sin perder ese fondo emocional."En última instancia, señala Tartakovsky, la película es el entretenimiento familiar perfecto."Nos divertimos mucho en esta película, con cuatro generaciones de Dráculas bajo un mismo techo y los humanos ahora aceptados en el mundo de los monstruos, pero también contiene un estupendo mensaje sobre aceptarnos unos a otros tal como somos. Esa es una lección que todos, ya sean padres o hijos, necesitan cada día."Fuentes:Pressbook e imágenes cortesía de ©Sony Pictures Releasing de España S.A.http://www.image.net/ By ©Getty Imageshttp://www.filmaffinity.com/es/film436246.html
"Puede que Drácula sea un monstruo de fama mundial, pero en realidad es un hombre de familia", —asegura el director Genndy Tartakovsky, que ayudó a reinventar a los monstruos clásicos, como Drácula, Frankenstein, el hombre lobo y muchos más, en la comedia de animación de gran éxito “Hotel Transilvania”. La película original de 2012 recaudó más de 350 millones de dólares en todo el mundo y aún mantiene el récord del estreno más taquillero del mes de septiembre de todos los tiempos en Estados Unidos. Y ahora la pandilla de Drácula vuelve, con Tartakovsky una vez más en la dirección. La película empieza con los humanos y los monstruos aprendiendo por fin a coexistir. "Todo marcha bien en el mundo de Drácula", —comenta Tartakovsky—. "Jonathan y Mavis se han casado y han tenido un hijo, Dennis; y eso lleva a la gran pregunta de esta película: ¿es Dennis un vampiro o un humano? Mavis y Johnny están dispuestos a aceptar a su hijo por lo que quiera que sea pero, naturalmente, Drácula espera secretamente que Dennis sea un vampiro. Teme que, si Dennis es humano, Mavis quiera criarlo en el mundo de los humanos y no en el hotel. Así que Drácula pretende hacer cuanto esté en su mano para conseguir que Dennis enseñe los colmillos."Como toda madre abnegada, Mavis quiere lo mejor para su hijo. Por mucho que le encante el hotel (que es, al fin y al cabo, el único hogar que ha conocido) siente que, si Dennis es humano, lo mejor para él sería criarse con otros humanos. Así que, para ver cómo podría ser eso, Mavis deja a su padre al cargo de Dennis mientras ella va con Johnny a visitar a su familia política humana en su ciudad natal de Santa Cruz. Mientras ella descubre los fascinantes usos y costumbres de la vida humana (desde sus 48 sabores de granizados a las tiendas abiertas 24 horas), Drácula está perdiendo un poco la cabeza en el hotel imaginándose su vida sin su hija, lo que no hace sino convencerlo aún más para conseguir que el pequeño Dennis saque los colmillos y darle así a Mavis una razón para no dejar nunca el Hotel Transilvania. La solución de Drácula: un épico viaje por carretera, en el que Drácula y sus amigos no reparan en medios para hacer pasar al pequeño “aprendiz de monstruo” por un completo campamento de entrenamiento de monstruos; sin embargo, sus planes se van al traste cuando el propio padre de Drácula, Vlad, les hace una visita sorpresa."Vlad es un vampiro de la vieja guardia", —explica Tartakovsky—. "Drácula y su padre mantienen una relación muy tumultuosa y contenciosa, no paran de discutir. Vlad no deja de criticarlo y Drácula se pone a la defensiva." Por otro lado, la productora Michelle Murdocca puntualiza: "Vlad es desternillantemente intenso, duro e implacable a ultranza. No le da un momento de respiro a Drácula. Es fácil entender por qué Drácula es como es."
Vlad está interpretado por el mito de la comedia Mel Brooks, uno de los pocos EGOT del mundo (lo que significa que ha ganado un Emmy, un Grammy, un Óscar y un Tony)."Es uno de los grandes pilares de la comedia, está en activo desde hace una eternidad, dio forma a mi sentido del humor y sigue siendo ingenioso y agudo, así que estaba muy nervioso de pensar en dirigirlo. Es asombroso, no es que necesite que lo dirijan", —confiesa Tartakovsky—. "Pero recuerdo que, en cierto momento, quería oír cómo me parecía que debía decir una línea concreta. ¿Qué iba a decirle yo a Mel Brooks?Pero quería que lo hiciera, así que lo hice, y le gustó, y lo hizo igual que yo. Fue un momento increíble para mí, nunca se me olvidará."En la versión española de la película, es el gran Arturo Fernández quien se hace cargo de la voz de Vlad. Un clásico de la escena y el cine español como Arturo Fernández era la elección ideal para este personaje. "Me costó animarme a aceptar el trabajo, no me atrevía en un principio, pero me ha dejado un sabor muy grato y me gustaría repetir la experiencia. El público tendrá mucha curiosidad por oír estas voces incorporadas en la película."Por encima de todo, Tartakovsky asegura que el equipo de la película no ha perdido nunca de vista qué es lo que hace tan especial a 'Hotel Transilvania': "Tuvimos ocasión de redefinir a los monstruos: Drácula, Frankenstein, el hombre invisible, la momia. Constituyen un material estupendo, con el que poder hacer algo muy divertido, caricaturesco, que no se tome muy en serio, y conseguir una película realmente graciosa. Para este filme, me pareció que seguía habiendo una conexión con los personajes y que sería divertido regresar a este mundo y ver cómo sería su siguiente aventura. Así que ese es nuestro objetivo: hacerla divertida, irreverente, fresca y llena de payasadas, pero sin perder ese fondo emocional."En última instancia, señala Tartakovsky, la película es el entretenimiento familiar perfecto."Nos divertimos mucho en esta película, con cuatro generaciones de Dráculas bajo un mismo techo y los humanos ahora aceptados en el mundo de los monstruos, pero también contiene un estupendo mensaje sobre aceptarnos unos a otros tal como somos. Esa es una lección que todos, ya sean padres o hijos, necesitan cada día."Fuentes:Pressbook e imágenes cortesía de ©Sony Pictures Releasing de España S.A.http://www.image.net/ By ©Getty Imageshttp://www.filmaffinity.com/es/film436246.html
Sus últimos artículos
-
Entrevista a Raúlo Cáceres, ilustrador del dossier "Insania Tenebris".
-
Los Blogos de Oro se reinventan para convertirse en los primeros premios de cine español independiente.
-
Nace el fanzine "Quimeras", mi primer proyecto editorial...
-
Entrevista a José Manuel Villena, por el 5º aniversario de su fanzine "El Kronomonstruo".