Parece que el representante republicano Mike Conaway (en la foto) terminó la investigación sin reunirse con el demócrata de mayor rango en su panel, el representante Adam Schiff, o con senadores demócratas dirigiendo la investigación de su panel sobre la interferencia rusa. | Foto de Andrew Harnik / AP
El presidente Donald Trump inmediatamente reclamó vindicación en el informe, que los demócratas criticaron como prematuro y engañoso.
Por KYLE CHENEY
12/03/2018 07:01 PM EDT
Actualizado 03/12/2018 10:40 PM EDT
2018-03-12T10: 40-0400
Los republicanos del Comité de Inteligencia de la Cámara cerraron su investigación sobre la interferencia electoral rusa el lunes, declarando que no encontraron evidencia de que la campaña del presidente Donald Trump en 2016 cooperara con el Kremlin, una conclusión que Trump celebró rápidamente, pero que los demócratas llamaron prematura e incluso engañosa.
Poco después del anuncio republicano, Trump reivindicó triunfalmente la reivindicación en Twitter . “EL COMITÉ DE INTELIGENCIA DE LA CASA TIENE, DESPUÉS DE UNA INVESTIGACIÓN EN PROFUNDIDAD DE 14 MESES, NO ENCONTRÓ EVIDENCIA DE COLUSIÓN O COORDINACIÓN ENTRE LA CAMPAÑA TRUMP Y RUSIA PARA INFLUIR EN LA ELECCIÓN PRESIDENCIAL DE 2016”, escribió.
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Los republicanos de la Cámara también dijeron que un informe de 150 páginas que prepararon -sin consultar a sus colegas demócratas- contradice la firme conclusión de la comunidad de inteligencia estadounidense de que el objetivo del esfuerzo del gobierno ruso era impulsar la campaña de Trump.
“No creemos que sea compatible con los datos subyacentes”, dijo el representante de Texas Mike Conaway, el líder republicano de la investigación, en una entrevista telefónica. Conaway dijo a los periodistas el lunes que algunas figuras de la campaña de Trump pueden haber mostrado un mal juicio al reunirse con figuras vinculadas al Kremlin, pero que las reuniones no habían sido colusión.
Conaway dijo que docenas de entrevistas y una revisión exhaustiva de los hallazgos de las agencias de inteligencia sugieren que el objetivo ruso era sembrar confusión y discordia, no para ayudar a Trump. Añadió que se publicaría un segundo informe sobre ese tema específico.
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Trump seguramente dará la bienvenida a esa opinión también. Se dice que se resiente de las sugerencias de que la intromisión rusa podría socavar la legitimidad de su elección. Y ha insistido en que el Kremlin no tendría ninguna razón para apoyar su victoria, a pesar del hecho de que Trump habló en repetidas ocasiones de hacerse amigo del presidente ruso Vladimir Putin y de reparar las fracturadas relaciones entre EE. UU. Y Rusia.
La embajada de Rusia en Washington celebró los hallazgos de la Cámara de Representantes en Twitter citando directamente a Conaway: “Todas las ‘investigaciones de Rusia’ (no solo en los EE. UU.) Están destinadas a terminar cuando [Conaway] concluyó brillantemente: ‘solo Tom Clancy podría tomar esta serie de inadvertencias contactos, reuniones, lo que sea, y entrelazar eso en una especie de thriller de espías que podría salir “.
Los demócratas dijeron el lunes que la conclusión del Partido Republicano de la Cámara agrega una nueva urgencia a la investigación en curso del abogado especial Robert Mueller. Pero la conclusión republicana podría proporcionar a Trump más municiones para atacar la investigación de Mueller, que el presidente calificó de “caza de brujas”.
Las últimas acusaciones de Mueller, presentadas el mes pasado contra 13 ciudadanos rusos acusados de manipular las redes sociales de los EE. UU. Y organizar concentraciones políticas durante la campaña de 2016, afirmaron que los rusos no solo buscaban desacreditar a Hillary Clinton, sino también ayudar a Trump. Los rusos trabajaban para una “fábrica de trolls” en internet financiada por un conocido aliado del presidente ruso Vladimir Putin.
Los demócratas estallaron en cólera después de que fueron sorprendidos por un informe resumido publicado por los republicanos del comité. Dijeron que confirmaba su visión de larga data, respaldada por un reciente memorando republicano secreto que alegaba un sesgo anti Trump por parte del Departamento de Justicia y funcionarios del FBI, que los republicanos de la Cámara estaban más interesados en cubrir al presidente que en una cuenta pública exhaustiva de Intromisión política de Rusia.
“Al poner fin a su función de supervisión en la única investigación autorizada en la Cámara, la mayoría ha puesto los intereses de proteger al presidente sobre la protección del país, y la historia juzgará sus acciones con dureza”, dijo el representante de California Adam Schiff, el principal demócrata en el Comité.
En una entrevista en “The Rachel Maddow Show” de MSNBC, Schiff dijo que los Demócratas en el comité continuarían investigando de manera independiente, aunque carecen del poder para obligar a los testigos a través de una citación.
El Comité de Inteligencia del Senado, que ha operado de una manera mucho más bipartidista que su contraparte de la Cámara, todavía está llevando a cabo su propia investigación de la interferencia electoral rusa. También lo es el Comité Judicial del Senado, que se ha visto dividido por disputas partidistas.
Los republicanos de la Cámara dicen que quieren pasar del divisivo tema de la colusión y centrar sus esfuerzos en bloquear la interferencia rusa en futuras elecciones.
“Después de más de un año investigando las acciones de Rusia en las elecciones de 2016, estamos en la primera temporada para las elecciones de 2018 y los expertos advierten que debemos protegernos contra más interferencias”, dijo AshLee Strong, vocera del presidente Paul Ryan. “De eso se trata esta próxima fase y esperamos que los demócratas se unan a nosotros para ver esto”.
El comité entrevistó a su último testigo en la investigación, el ex gerente de campaña de Trump, Corey Lewandowski, la semana pasada. Pero el informe de 150 páginas aún debe pasar por una revisión de clasificación por parte de las agencias de inteligencia. Ha estado en proceso durante semanas, un comité de proceso que los republicanos no revelaron a sus contrapartes demócratas ni a los medios.
El informe del Partido Republicano encuentra que los rusos intentaron “sembrar discordia”, criticaron un “deslucido” esfuerzo del gobierno de Obama para combatir las actividades cibernéticas rusas y sugirieron que los funcionarios de inteligencia podrían haber tenido contactos inapropiados con los medios.
La contradicción del informe de los hallazgos de la comunidad de inteligencia de los EE. UU. Probablemente exacerben aún más las tensiones entre los partidarios de Trump y los funcionarios de inteligencia acusados de representar un “estado profundo” anti-Trump.
Incluye lo que Conaway le dijo a POLITICO que era “casi un año de trabajo” al revisar las conclusiones de la comunidad de inteligencia sobre la interferencia electoral rusa. Pero el lunes no ofreció ningún detalle específico sobre por qué cree que la conclusión de inteligencia -que el Kremlin, después de comenzar a socavar a Clinton, entró a trabajar en nombre de la campaña de Trump- estaba equivocada.
“Evaluamos que el presidente ruso, Vladimir Putin, ordenó una campaña de influencia en 2016 para las elecciones presidenciales de Estados Unidos”, declaró el informe de octubre de 2016 de la Oficina del Director de Inteligencia Nacional, el FBI, la CIA y la NSA.
“Los objetivos de Rusia eran socavar la fe pública en el proceso democrático de Estados Unidos, denigrar a la secretaria Clinton y perjudicar su elegibilidad y posible presidencia. Evaluamos más a Putin y el gobierno ruso desarrolló una clara preferencia por el presidente electo Trump. Tenemos una gran confianza en estos juicios “, declaró el informe.
Al comienzo de la investigación del Comité de Inteligencia de la Cámara, su presidente, el Representante Devin Nunes (R-Calif.), Persiguió acusaciones aún sin fundamentar de que los funcionarios de la administración de Obama manejaron incorrectamente la vigilancia clasificada de los asociados de Trump. Los demócratas acusaron que el verdadero objetivo de Nunes era socavar la credibilidad de las acusaciones de que Trump o sus asociados podrían haber sido influenciados por el Kremlin.
Schiff y otros demócratas del panel acusaron a los republicanos de apresurar la conclusión de la investigación antes de que el comité haya desarrollado una imagen completa de cómo Rusia intervino en la votación de 2016.
El comité no ha entrevistado a varios asociados clave de Trump que han sido acusados o se han declarado culpables en el transcurso de la investigación de Mueller. Entre ellos se incluyen el ex presidente de la campaña de Trump Paul Manafort y su adjunto Rick Gates, el ex asesor de seguridad nacional Michael Flynn y el asesor de política exterior de la campaña Trump George Papadopoulos.
En los últimos días, varios miembros republicanos del Comité de Inteligencia de la Cámara han estado llamando abiertamente a cerrar la investigación, alegando frustración por la tensión incesante en el panel, las filtraciones de las entrevistas de los testigos y un clima de desconfianza que ha dañado el espíritu histórico del comité de bipartidismo.
Los demócratas, sin embargo, han insistido en que los republicanos muestran poco interés en obtener respuestas directas de los principales aliados de Trump, como el hijo del presidente Donald Trump Jr., el director de comunicaciones de la Casa Blanca Hope Hicks y el abogado personal del presidente Michael Cohen.
Schiff y el resto del comité Los demócratas se han quejado de que los republicanos de los comités no han forzado a los testigos a responder preguntas, a citar documentos o incluso a intentar analizar posibles enredos financieros entre Trump, sus socios y Rusia.
También parece que Conaway terminó la investigación sin haber convocado una reunión con Schiff y Sens. Mark Warner (D-Va) y Richard Burr (RN.C.), quienes encabezan el panel del Senado investigando la interferencia rusa. Aunque Conaway había sugerido en diciembre que esperaba alinear los hallazgos objetivos de su comité con la investigación del Comité de Inteligencia del Senado, una fuente familiarizada con las investigaciones dijo que no habían tenido lugar reuniones.
La decisión de Conaway se produce a pesar de los recientes informes del interés de Mueller en un nuevo ángulo: el viaje en enero de 2017 del fundador de Blackwater, Erik Prince, a Seychelles, donde se reunió con el líder de un fondo de inversión administrado por el gobierno ruso.
Los informes sugieren que los investigadores creen que Prince estaba actuando como representante del equipo de transición de Trump, pero Prince le dijo al Comité de Inteligencia de la Cámara que no era cierto.
La investigación de la Cámara de Representantes se ha visto afectada desde sus inicios por la creciente hostilidad entre republicanos y demócratas, una dinámica que creció hasta convertirse en una distracción paralizante. Los miembros se acusaron mutuamente de filtrar información sensible de las audiencias internas del comité, y el panel fue desviado durante semanas mientras los republicanos tomaban medidas sin precedentes para divulgar información clasificada que impugnaba la integridad de los agentes del FBI involucrados en los primeros días de la investigación en Rusia.
Los demócratas han aumentado las alarmas en las últimas semanas en medio de indicios de que los republicanos se están moviendo rápidamente para reducir la investigación.
Schiff publicó una lista de pedidos de citación demócrata que han sido ignorados por los republicanos del comité, incluyendo más detalles de Donald Trump Jr. sobre las consecuencias de las noticias que había conocido en 2016 con los rusos conectados con el Kremlin en Trump Tower; registros de viaje, telefónicos y bancarios de Cohen; y el testimonio de Hicks, quien se negó a hablar sobre su tenencia en la Casa Blanca y ciertos elementos de la transición.
Los republicanos, sin embargo, han argumentado que los demócratas están siguiendo la investigación para generar titulares dañinos sobre los miembros del equipo de Trump.
Cuando se le preguntó acerca de las críticas de que los republicanos estaban terminando la investigación prematuramente, Conaway dijo que algunos críticos nunca estarían satisfechos.
“Todavía hay personas que no están de acuerdo con el informe Warren sobre el asesinato de Kennedy”, dijo.
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