Hoy compartimos… me lo contó mi abuelo/a

El tema de este mes de Hoy compartimos es: me lo contó mi abuelo/a. Yo no conocí a mi abuela paterna (lo mismo le ha pasado a mis hijas) y mi abuelo paterno falleció cuando yo tenía 5 años así que no recuerdo mucho de él. Así que tenía que elegir entre mi abuelo o mi abuela maternos. A los dos los quiero con locura porque nos han cuidad muchísimo, pasábamos las vacaciones de verano en Alicante y en Barcelona con ellos y el resto de días sin cole en su casa de Madrid. Al final, he elegido hablar de mi abuelo materno porque ha sido una persona muy importante en mi vida.

Siempre he estado muy unida a él porque unos días antes de que yo naciese se rompió la cadera y él y mi abuela se tuvieron que mudar a casa de mis padres para que mi abuela le pudiese cuidar a él y echarle una mano a mi madre con mi hermana.

Cuando nací era un poco llorona y solo me callaba cuando estaba en brazos de mi abuelo, así que me pasaba todo el día allí. Él tampoco podía hacer mucho más que cuidarme así.

Yo creo que este hecho hizo que tuviésemos una relación muy especial. De hecho, mi abuelo reconocía delante del resto de nietas que yo era su favorita. Cada vez que lo decía mi abuela se enfada mucho y él le contestaba: ¿por qué no lo voy a decir si es verdad?

Mi “yayito” como yo le llamaba me enseñó a atarme los cordones, a montar en bici, historias de la familia, a  jugar a las cartas, a que es imposible coger una paloma aunque corras detrás de ella…

Cuando estábamos en su casa nos llevaba a jugar a El Retiro o a visitar el Palacio Real o los Jardines de Moro o la Plaza Mayor… Recuerdo que me gustaba ir al parque con él porque siempre nos dejaba hacer lo que quisiésemos, sin embrago, mi abuela, nunca nos dejaba jugar tranquilas en los columpios porque decía que nos íbamos a caer.

Falleció en 2008 con 92 años, la verdad es que fuimos unos privilegiados por poder disfrutar tanto tiempo de él.  Lo malo es que lo hizo 4 meses antes de que naciese mi hija pequeña. Me hubiese gustado tanto que la conociese… porque es una miniyo (lo dice todo el mundo). Estoy segura de que le hubiese traído unos recuerdos estupendos.

Era una persona maravillosa que siempre estaba pendiente de los demás y que nunca se quejaba por nada. Al final le preguntabas que qué tal estaba y siempre te decía que fenomenal aunque yo veía que se iba apagando.

Fue muy duro decirle adiós, pero es ley de vida y creo que soy una afortunada porque disfruté de él muchísimo.

Aquí os dejo el resto de blog que participan en Hoy compartimos… os invito a leer sus historias.

La fragua
Amor por la decoración
Nika Vintage
Podemos charlas juntas
El perro de papel
Mi pequeño gran mundo
A quien pueda interesar
Manualizando
Ruth simple life
Lo veo y me gusta
Casa Mairim
Vainilla, coco y algo más
Fetiches de cartón
El horno de mami
Mums and kids Madrid
I want it I need it 
Historias y pinturas
El nido de mamá gallina
Mamy a la obra
You planter
La bici azul
Mabel’s Kitchen

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