Hoy es 11/11/11. ¿sabes qué va a pasar hoy? yo sí…

Qué fecha más especial, 11 del 11 del 11. Hoy muchos dicen que se acabará el mundo y concretamente ocurrirá a las 11:11 con 11 segundos. Por si acaso yo ya he testado no sea que sea verdad. Claro que, ahora que lo pienso, si se acaba el mundo de que sirve legar tus posesiones si no va a quedar nadie. Creo que simplemente habría sido más fácil pulirme los pocos ahorros que tengo y les aseguro que habría hecho maravillas con 50 euros.

¿Y por qué se acaba el mundo? Pues porque hay muchos amantes de la numerología que, estando aburridos buscan cifras y fechas coincidentes con las que llamar la atención. Porque mira que ya se acabó el mundo en el año 2010, cuando tuvimos el 10/10/10 o incluso más apocalíptico resultó el cambio de siglo con el rumor aquel que corría por todos lados y que aseguraba que por culpa del efecto 2000 regresaríamos a la Edad de Piedra porque los ordenadores dejarían de funcionar.

Por estas razones anteriormente nombradas considero que no hay que hacer mucho caso a estas cosas porque si algo tiene que pasar, ésto…pasará. No porque sea la fecha ‘tal o cual’. Es más, si me apuran me atrevería incluso a afirmar que al funcionario de carrera maya que se le ocurrió la genial idea de decir hace miles de años que en el 2012 se acabaría el mundo, lo hizo para conseguir cierto rédito en la administración maya y ascender de puesto pasando a ser, tras su profecía, Jefe del negociado de Loterías y Apuestas.

No obstante sí creo en los números puesto que ellos esconden misterios ocultos, sino resultaría mucho más sencillo explicar por qué si sumamos los números que componen nuestra edad con los dos números con los que finaliza nuestra fecha de nacimiento esta siempre nos da como resultado 111. Sí, así es, y si no, les dejo unos segundos para que hagan la prueba… Así que si el mundo se acaba hoy 11/11/11 agradecerles que hayan malgastado sus últimos minutos leyendo esta editorial porque yo sinceramente habría empleado el tiempo en otra cosa.

Por ejemplo, en buscar otra enigmática fecha y dilatar una vez más el fin del mundo, aunque no sé por qué me da que mañana por la mañana, cuando todo vuelva a la normalidad, ya saltará algún ilustrado que nos ponga otra vez los pelos de punta con una nueva y apocalíptica fecha. Así que prefiero esperar y ver si se cumple la máxima de Charles Chaplin cuando aseguró que; “El tiempo es el mejor autor: siempre encuentra un final perfecto”.

Esta es la crónica habitual, de un día como otro cualquiera…