¡Hola a todos! Sé que últimamente no ha habido mucha actividad en mi blog, y creanme que lo siento por eso, PERO hay buenas noticias: ya estoy terminando de leer Enclave, y muy pronto, probablemente mañana o pasado les suba la reseña, de eso pueden estar seguros.
Y bueno, no me gusta mucho decir que cumplo años, porque, yo veo eso como decir: "Oye, cumplo años. Sí, existo, ¡felicítame!" Aunque sé que muchos lo toman de diferente manera, yo así lo veo. Sin embargo, esta publicación no es para que me feliciten. Pueden felicitarme o no, no están obligados. No saben cuanto agradezco que lean mis publicaciones. Cada comentario de cada uno de ustedes es un gran regalo para mí, y estoy muy orgullosa de esto que se ha ido formado al paso de los meses.
Cumplo aproximadamente cinco meses con este maravilloso blog, y me gustaría sortear algún libro o cosas geniales, pero no cuento con recursos ahora mismo. Pero no duden que pronto habrá sorpresas y espero que estén ahí para leer mis entradas.
Y como esta imagen me dio risa, voy a ponerla...
Mis 16 años no han sido nada fáciles. La verdad han sido los más duros meses de mi vida, debido a problemas personales, así como de mi persona. Aprendí muchísimas cosas, y creo que si me pusieran enfrente a la Londres de hace un año, no me reconocería, y me sentiría mal por esa chica que sufría por cosas que nunca valieron la pena. Sí, fui muy idiota el año pasado, ¿saben? Y todo esto fue por un muchacho, lo cual es de esperarse, no sorprende a nadie y algunos pondrán los ojos en blanco y dejarán de leer, pero, la verdad no me arrepiento de haber comeido esos errores, porque gracias a eso, soy lo que soy ahora mismo, y estoy orgullosa de ser quien soy. Me he vuelto más segura de mí misma, y el centro de mi universo, podrían decir que es mi novio, pero en parte se equivocarían, porque el mundo gira entorno a mis seres queridos. Gente que esperaba con ansias me escribiera una biblia virtual, pues mis mejores amigas no puedo verlas debido a su horario escolar, y los fines de semana se ocupan.
Gracias a ellos, mi mundo gira, y le agradezco mucho a Rafita, Mariana, Orietta (París) y por supuesto Karla, por estar ahí cuando todo parece perdido. Ellos siempre han sido la luz al final del túnel.
Y, claro, le debo mucho a esos libros que leí el verano pasado, cuando trataba de escapar de un mundo lleno de problemas, para vivir en uno maravilloso, donde todo es perfecto.
También le debo mucho a la pintura. Bueno, no soy una pintora, pero, digamos que logré pintar un cuadro del gato de Cheshire de Alicia en el País de las Maravillas, y un globo aerostatico de mariposas, como pueden ver en la imagen.
Gracias a Anita Grace Howard, por regalarme los dos últimos libros de esa preciosa saga que tanto amo ( aunque algunos no se animen a leerla), definitivamente ha cumplido uno de mis sueños.
A mi papá, que aunque no pueda verlo, y cometa errores, hace lo posible por darnos lo que puede. A mi mamá, de quien admiro esa gran fortaleza que espero poseer algún día, a mi hermano, con quien me peleo para demostrar cariño y a mi abuela, que aunque sea muy orgullosa o no la aguante en muchas ocasiones, la seguiré queriendo.
Y sé que algunos dirán: "¿A mí que me importa tu vida? ". Pues verán, no espero que lo entiendan, y no pretendo ser el centro del universo hoy, pero sí voy a disfrutarlo. Sé que probablemente de igual lo que haga con mi vida, porque nadie de aquí me conoce de fondo, pero debo vivir el momento y me toca agradecerles por ser parte de mi vida, comentando mis entradas y dando su opinión valiosa.
Agradezco a Narnia, por darme esos maravillosos años de infancia y adolescencia, porque si hubiese sido ignorante de estas historias, jamás hubiera conocido a París, y ¿quién sabe que sería de mí en este momento?
Gracias a Edmund Pevensie, el justo, que comparte conmigo ese valor y esa exigencia por que todo sea justo y a todos les toque lo mismo, por igual. Y a Skandar Keynes, por hacer de mis primeros años de adolescencia, algo maravilloso. Gracias por despertar ese sueño en mi interior de visitar Londres y, si Dios quiere, hacer una vida allá.
Y bueno, estoy cada vez más contenta. Creí que hoy sería un día aburrido, pero en vez de eso me ha entrado la nostalgia y comienzo a aprovecharlo, aunque aún así detesto que me canten las mañanitas, o que me den abrazos y esas cosas. Simplemente no soy muy cursi. ¡Y AGRADEZCO ENORMEMENTE AL ESCRITOR CHRISTOPHE PAUL POR REGALARME DOS DE SUS LIBROS DEDICADOS! ¡Este sí que es el mejor día!
Por cierto, quiero revelar mi verdadero nombre, ahora que es una ocasión especial. Me llamo Marifer Ravelo.