Hay días y días. Días buenos, menos buenos, días de bajones, días de alegrías y hay días como el de hoy. Un día especial, un día para celebrar, un día para demostrar que no estáis solas. Un día para miraros, y sentirnos orgullosos de todas vosotras, que siempre lucháis, que siempre tenéis una sonrisa en la cara y nunca perdéis la esperanza. La esperanza de seguir peleando por ganar la batalla, esta batalla que sin aviso os tocó. Y aquí estáis, demostrando que de todo se sale, que hay cosas mucho mas importante que el trabajo, el dinero, los enfados... Y es que vosotras mas que nadie nos haceis ver que lo mas importante es la salud, y estar con los tuyos, porque nunca sabes cuando te puede tocar luchar contra esta batalla. Por vosotras luchadoras, porque juntas y día a día salgáis victoriosas de esta batalla que a nadie nunca le debería tocar luchar.