Desde hace ya algunos años, el negocio de los smartphones de HTC viene cayendo igual que una pila de dominós. A pesar de la que firma taiwanesa ha estado lanzando teléfonos muy decentes durante estos últimos tiempos, no ofrecen absolutamente nada innovador o lo suficientemente diferencial como para que la gente de decida. En realidad, no importa lo que haga HTC, la acogida del público es casi siempre fría. El último buque insignia de la firma taiwanesa, el HTC 10, nada innovador, cierto, pero sobresaliente en todos los demás aspectos, podría considerársele un fracaso absoluto, y si el recientemente lanzado HTC Bolt (o HTC 10 Evo) no se vende bien, será el último.
De acuerdo con un reporte del portal Mobipicker (con información proveniente de China), HTC ha venido afrontando recientemente pérdidas muy serias y actualmente le está resultando demasiado difícil sobrevivir en el sector smartphones. HTC quiere evitar a toda costa la bancarrota, y tal y como nos indica Mobipicker, para ello quiere deshacerse de su división móvil, su principal lastre. Y es Cher Wang, presidente HTC, quien estaría pensando seriamente en vender la división móvil de la empresa que ayudó a fundar.
Aunque HTC lo está negando rotundamente, probablemente sólo quieren ocultar la noticia para evitar malos comentarios de la prensa debido a su precaria situación financiera. De ser ciertos los rumores que corren por Mobipicker y varios medios de prensa chinos, para 2017, HTC dejará de existir para siempre como marca en móviles.