Huevo: una de las mejores fuentes de proteínas para los deportistas

El huevo forma parte de la base de la alimentación de cualquier dieta equilibrada. Es un alimento barato, con propiedades nutricionales muy intersantes y que se puede cocinar de muchas formas diferentes.

Características principales del huevo

Proteínas

Los huevos destacan por su aporte de de alto valor biológico, es decir, aporta proteínas de mucha calidad.

Las proteínas son fundamentales para cualquier deportista, ya que van a contribuir tanto al desarrollo como a la recuperación muscular. Además las proteínas que lleva el huevo se digieren más fácilmente que aquellas que están presentes en alimentos como la carne o los lácteos.

Grasas

Las grasas de este alimento se concentran fundamentalmente en la yema. Son grasas que al igual que las proteínas se digieren muy fácilmente y se separan fácilmente de las proteínas.

Para aquellos que quieran ingerir principalmente proteínas deberán comerse sólo la clara del huevo.

Minerales

El huevo no solamente va a aportar proteínas y grasas, sino que en su composición también tiene minerales fundamentales como el sodio, el potasio, el magnesio, hierro o zinc, entre otros.

Recordemos que el sodio, potasio y magnesio son minerales fundamentales para el correcto equilibrio celular y que su déficit es uno de los responsables de la deshidratación celular.

Versatilidad del huevo

Otra de las razones por las cuales los huevos son un alimento ideal es su versatilidad en la cocina. Se puede preparar de muchas formas diferentes. Éstas son algunas de ellas:

• Huevos cocidos: es una forma en la que el huevo nos va a aportar unos niveles de grasa muy bajos. Para prepararlos simplemente hay que cocer los huevos unos 11 minutos aproximadamente y echarles un poquito de sal. Una vez cocidos nos los podemos comer directamente o añadirlos a otras preparaciones como puede ser una ensalada.
• Huevos pasados por agua: en este caso el huevo sólo necesita tres minutos de cocción con un poquito de sal. Esta elaboración hay que realizarla justo antes de consumir los huevos.
• Huevos fritos: sin duda es una de las formas más sabrosas para preparar este alimento, pero también la que más grasas va a aportar, debido sobre todo al aceite. Para su elaboración deberemos cascar los huevos y echarlos en una sartén con aceite bien caliente. Una vez fritos, los sacaremos con una espumadera y estarán listos para consumir.
• Huevos al horno o al microondas: es una forma de tener algo parecido a un huevo frito, pero con menos grasa. Para ello hay que cocinarlo o bien en el horno o bien en el microondas. En el horno van a necesitar unos 4 minutos, dependiendo del horno y de la potencia. En el microondas bastará con un minuto a máxima potencia.