El hummus es una de mis comidas favoritas y en mi opinión no hay punto de comparación entre el hummus casero y el hummus que podemos encontrar en el supermercado. Cuando estuve viviendo en Praga no tenía batidora y no podía prepararlo en casa así que estuve probando varias marcas y como os digo no encontré ninguna que me terminara de convencer.
En España también he probado algunas marcas de hummus y aunque reconozco que el hummus del Mercadona no está malo sigo prefiriendo el casero. Cuando preparas tu misma la comida tú controlas los ingredientes que pones y la calidad de los mismos y para mí esto ya es motivo suficiente. Además puedes adaptar las recetas a tu gusto y añadir más o menos de un o otro ingrediente en función de tus preferencias.
Con el hummus he hecho un montón de variaciones y en el blog he subido las recetas del hummus de lentejas y del hummus de judías blancas. Una vez probé de hacer hummus con aguacate y sinceramente no me gustó nada, había visto la receta muchas veces y pensaba que me encantaría porque me gusta tanto el hummus como el aguacate pero el resultado final fue un fiasco, así que no siempre lo experimentos salen bien.
En el caso de este hummus de espinacas sólo he añadido un manojo de espinacas a la receta básica de hummus que suelo hacer. Para hacer el hummus a veces uso sésamo tostado o tahini dependiendo de lo que tenga en casa y lo mismo hago con el ajo. La receta original lleva gajos de ajo pelados y cortados pero a veces me da pereza y simplemente añado un poco de ajo en polvo. Como todo, es cuestión de adaptarlo a los gustos y necesidades de cada uno.
Además de untarlo en tostadas o comer con palitos o verduras, también podemos añadir el hummus a nuestras comidas diarias. Añadiendo un poco más de agua o zumo de limón podemos conseguir una textura más suave que simule una salsa para la pasta y también podemos mezclarlo con cualquier otra comida a la que le quede bien las espinacas y los garbanzos. Yo preparé bastante cantidad y la usé para dos comidas diferentes.
Si haces más cantidad de la que vas a usar ese día te recomiendo que lo guardes en la parte más fría de la nevera e intentes consumirlo antes de cuatro días. Espero que os guste la receta 🙂 .
Ingredientes:
- 250gr de garbanzos cocidos
- Zumo de 1/2 limón
- 1 cucharada de sésamo tostado o tahini
- Ajo en polvo o 2 dientes de ajo pelados
- 1 manojo de espinacas
- Agua
Instrucciones:
En un bol mezclamos los garbanzos, el zumo de medio limón, el sésamo y el ajo y lo trituramos con una batidora hasta que quede una masa homogénea. Podemos añadir un poco de agua hasta conseguir la textura que queramos.
Añadimos el manojo de espinacas y lo trituramos todo de nuevo.
¡Listo!