Revista Religión
Hoy traemos hasta nuestra sección de la iconografía de la Divina Pastora de Cantillana una obra pictórica de reciente factura, una pintura que se convirtió en uno de los mejores regalos de bodas que se puede recibir y que es propiedad de la familia Rodríguez-Esteban. Una obra de excelente calidad que viene a engrosar la interminable lista de representaciones que en multitud de formatos y materiales vienen a hacer presente a la más venerada imagen de Cantillana en multitud de hogares, templos y lugares públicos repartido por todo el universo.
El autor de la obra es David Payán un joven artista pastoreño que además de recibir la formación pertinente de la facultad de Bellas Artes, es discípulo de otra artista, también cantillanera como es Isabel Sola. David Payán ya se ha encargado de anunciar con sus pinceles diferentes eventos, ha sido cartelista de la imposición de la Medalla de Oro de la Villa de Cantillana a la Virgen del Consuelo, de la Hermandad de la Soledad de Alcalá del Río en 2014 y 2015, del Corpus de Cantillana de 2014, de varias ferias como la de Villaverde del Río, el Priorato o la Roda de Andalucía, de la hermandad de Pino Montano en el 2015, o de la procesión magna que se va a celebrar en Cabra el próximo 19 de Septiembre y de la proxima salida de la Divina Pastora de Chiclana de la Frontera, entre otros; y sin duda está llamado a realizar el cartel anunciador de nuestra Romería, o el de nuestra fiesta mayor y poner su arte al servicio de nuestra hermandad como le corresponde como hermano de la misma.
La pintura que nos ocupa presenta un formato oval que aporta un rasgo original a una obra en la que el autor parece acercarse al hiperrealismo, la Divina Pastora aparece de cintura hacia arriba sin el sombrero ante un luminoso fondo celeste y con las joyas del siglo XVIII habituales en su iconografía.