En el tramo que va de Aguilar a Vallespinoso, en el lugar despoblado de Quintanilla de la Berzosa, se encuentra la iglesia de San Martín, declarada Bien de Interés Cultural el 24 de febrero de 1993. Quintanilla de la Berzosa fue uno de los pueblos anegados por el embalse de Aguilar y como Frontada, su iglesia, de bella espadaña, se libró de las aguas al estar situada en una loma, junto a una necrópolis con tumbas antropomorfas. Curiosamente, fue en este templo donde comenzaron los estudios previos a las labores de restauración en el año 2009, dentro del Plan de Intervención del Románico Norte. Se trata de una intervención plena que, unida a las reformas que ha ido acusando a lo largo de los siglos - al decir de los responsables del Plan-, los vestigios de la fábrica romana primitiva son prácticamente accidentales.
La mirada
En su origen fue un edificio románico, conservando de esta época la espadaña, los pies de la iglesia y algunas arquivoltas de la portada. Llama la atención la portada donde dos capiteles se han reutilizado como canecillos instalándose en el frontal, en uno de ellos podemos ver la representación de una sirena de doble cola bastante curiosa. Miguel Ángel García Guinea dijo de ella "es un monumento interesante, pues vemos en el palpablemente el choque de la idea constructiva románica con la nueva inventiva gótica".
Cuaderno de anotaciones
Municipio: Aguilar de Campoo
Lugar despoblado
-Cerca del edificio encontramos una serie de tumbas antropomorfas que formaron parte de la necrópolis medieval.
-Durante un curso de fotografía del patrimonio en la Fundación Santamaría, el zamorano José María Menéndez Jambrina descubrió un friso de la adoración de los Reyes Magos, en buen estado de conservación, que puede tratarse de una Epifanía.