Iker Casillas, portero del Real Madrid y la Selección, fue entrevistado por Iñaki Gabilondo en Canal +. El internacional aseguró que "parecía la peste" cuando las cosas iban mal en su equipo y aclaró que "nunca pidió perdón a Xavi" en la tormenta de clásicos de hace dos temporadas. También confesó que se sintió aislado por Florentino Pérez en su pulso con Mourinho.
Actualidad: “He pasado una mala racha. Sobre todo porque una lesión hace que te cambie la vida, pero siempre que viene una mala racha sacas conclusiones positivas”.
La bronca de Barcelona: “Es más de lo mismo. Se comenta una historia que no es verdad. Yo llamé a Xavi y a Puyol y nos echamos la bronca mutuamente. El espectáculo de aquellos partidos era lamentable pero en el momento en que jugábamos cada uno miraba por lo suyo. Antes de los Barça-Madrid había mucha tensión, pero se nos fue de las manos hasta llegar a aquel partido en que nos metieron el 3-2; estábamos en una situación tensa. Nosotros defendíamos a nuestro entrenador. Hablé con Xavi y hablé con Puyol. Nos dijimos de todo. Ellos hablaban de patadas, nosotros de que protestaban al árbitro. Iker Casillas no pide perdón a Xavi. Llamé para decir que eso iba a pasar factura. La gente dice que si es bajarse los pantalones y no fue así. Hubo tensión y en la Selección nos reprochábamos cosas pero ese año perdimos la eliminatoria de Copa, ganamos la Liga y empezaron a venir buenos tiempos”.
Mourinho no lo creía: "Eso habría que preguntárselo a Mourinho, a mí no me ha dicho nada. Es una historia. Es mentira que yo pidiese perdón a Xavi".
Acusaciones de traidor y topo: “Digamos que en este país, que tiene miles de cosas positivas, también tiene cosas malas. Y entre esas cosas malas está la envidia. Es cierto que hace unos meses todo era nefasto y era el culpable de todo, el primer problema, Todo el mundo quería erradicarme porque parecía la peste. Pero me ha venido fenomenal para ver cuál era la situación. Eso sí, por la calle sólo encuentro cariño de la gente, del madridismo y de los que no son del Madrid por lo que hicimos”.
Los problemas: "La etapa de José Mourinho en el Madrid fue muy buena para nosotros. Lo pensaré siempre. Conseguimos igualar la distancia con el Barça. La primera etapa fue muy buena, la última no tanto. Ahí cada uno habla de cosas pero esto fue una relación que no dio más de así. Mi máximo respeto a los entrenadores es total, pero cuando hay una cosa que no te gusta, debes debatirla. Debes respetar a tu jefe”.
Culpables: "Cuando hay una situación que no es la adecuada empezamos a buscar culpables. Después de la suplencia en Málaga en diciembre de 2012 el equipo estaba mal en la Liga pero en la Copa y la Champions andaba bien. Entonces me dio un toque de atención. Luego, salí en ese partido, ganamos y jugué cinco o seis partidos hasta que me lesioné. Ganamos todos los encuentros, no encajamos goles. Me sirvió de toque de atención”.